LA FERIA DE CALI

 DEVALUADA

POR LA GESTIÓN DE SU DIRECCIÓN

Cañaveralejo 

Se publicó un aviso de página entera, en el diario más importante de la ciudad de Cali, con la confirmación de los carteles de la Feria de Cañaveralejo que habían sido presentados el pasado 20 de octubre.-

Preocupados por la feria y más en éstos momentos por los que se precisa de toda la confianza y claridad de cara al público, se ha intentando reiteradamente, por todos los medios de comunicación durante éste  mes natural, entrar en contacto con el Presidente de la Asociación, Dr.- Alfredo Domínguez, o en su defecto personero oficial, sin obtener receptividad ni respuesta alguna. No parece muy adecuado y menos prudente, dar la callada por respuesta a las masivas demandas de parte de los aficionados, abonados y opinión pública, acerca de los carteles anunciados y las fechas.-

 En la presentación de carteles se había comprometido, El Dr.- Domínguez, a reconsiderar las peticiones sobre combinaciones y fechas; ha pasado el tiempo y nada de nada. Los responsables hacen caso omiso de los, sustentados e ingentes, reclamos efectuados por los que pasan por taquilla y mantienen la fiesta y la feria. No queremos pensar que les da igual el clamor popular, su proceder dista mucho de lo normal, de lo políticamente correcto, de los modales taurinos y sobre todo del respeto que merece el público.- Flaco favor el que están haciendo a la otrora feria más importante de América y que precisamente por su mal manejo está más devaluada que una falsa moneda.-

“Cañaveralejo contaba, en el orbe taurino, con el honor de celebrar la última corrida del año y la primera; en su ciclo estaba la fecha del 31 de diciembre y el 1 de enero.  Por primera vez en su historia no tendrá la última corrida del año y la primera del 2013. Esta decisión ha creando malestar entre la afición con diversos criterios. Lo cierto es que eran fechas emblemáticas en el abono y aficionados del mundo optaban por despedir el año y recibir el nuevo en la ciudad de Cali, no parece una decisión muy acertada”.-

“El Presidente de la plaza de toros de Cali, Dr.- Alfredo Domínguez  ante insistentes y sustentadas peticiones, comprometió su palabra para analizar el cambio de la corrida del 22 al 31. Hubiera sido una sabia decisión, la primera en beneficiarse de ello será la temporada y por ende la plaza. El 31 siempre hay posibilidad de que vaya más público y en todo caso, tendrá más atención y a buen seguro más difusión incluso internacional y lo emblemática de la fecha permanecería en el calendario taurino con todo lo fructífero que ello conlleva.- La sensatez debe imperar”.-

Las ferias por tradición deben ser fieles a sus fechas, no se puede concebir una feria de Santiago de Cali sin corridas el 31 de diciembre y el 1 de enero.-

Dr.- Alfredo Dominguez

Sin consultar a los toreros - muy extrañados y molestos por el cambio inconsulto -, decidieron arbitrariamente cambiar fechas, con ello ocasionan no solamente inconvenientes sino un total desprestigio y falta de formalidad que redundará incuestionablemente en la seriedad de los responsables, de la feria en sí  y de las futuras temporadas. Oscuro panorama y negro futuro para el ciclo caleño.-

Algunos toreros anunciados, desde hace más de veinte días han manifestado públicamente su imposibilidad de asistir por diferentes razones; otras ferias ya dieron a conocer los sustitutos. Cali, al día de hoy, no y todavía los mantienen sin dar información al respecto, creando más inquietud y desconfianza entre el soberano que tiene intención de asistir a las corridas.-

¿Cómo es posible que  no se tengan en cuenta la serias, razonables e incuestionables sugerencias efectuadas al Dr.- Domínguez  en la rueda de prensa del lanzamiento de carteles?

¿Cómo puede ser posible que  se exponga  a la plaza y a la feria, a ser objeto de  legítimos cuestionamientos e incluso vetos, por los apoderados españoles? – El malestar es demasiado grande.-

¿En qué manera  afrontará la  empresa la temporada del 2013 con las reiteradas informalidades con que se está manejando la presente?

¡QUE DIOS REPARTA SUERTE!