La Plaza México
Hassan Gonzalez, corresponsal en México
Por: Luis Ramón Carazo
El
5 de febrero reciente se conmemoraron 67 años de la corrida inaugural
de la plaza de toros México celebradas el 3 y el 5 de febrero de 2013.
De la del 3 Juan José Padilla y Fermín Rivera resultaron los
triunfadores y de la del 5 (sin obtener trofeos) hubo detalles de arte
de Morante de la Puebla, de maestría de Zotoluco y de gran arrojo de El
Payo.
Este fue el presente: Me parece interesante para quienes no lo conocen remontarme a los años de la construcción e inauguración del coso más grande del mundo.
Este fue el presente: Me parece interesante para quienes no lo conocen remontarme a los años de la construcción e inauguración del coso más grande del mundo.
El
empresario mexicano libanés Neguib Simón contra viento y marea llevó a
la realidad parte del proyecto de la Ciudad de los Deportes, que
incluía plaza de toros, cancha de tenis, frontón, boliche, cine,
restaurantes, arena de box y lucha, entre otras amenidades. Al final
sólo se hizo realidad La México y el estadio hoy conocido como Azul por
ser la casa del equipo de fútbol cementero.
El
ingeniero Modesto Rolland fue el constructor de la plaza, la
construcción se inicio el 1 de diciembre de 1944 en dónde se ubicaba una
ladrillera en la colonia Nochebuena. La construcción es una obra
monolítica de concreto premezclado.
Las estatuas que adornan y rodean el contorno del coso son diseño del valenciano Alfredo Just, quién contó con ayudantes de gran calibre, uno de ellos el genial Humberto Peraza.
Las estatuas que adornan y rodean el contorno del coso son diseño del valenciano Alfredo Just, quién contó con ayudantes de gran calibre, uno de ellos el genial Humberto Peraza.
En
aquellos años falleció el hermano incómodo de Manuel Ávila Camacho,
Maximino (recreado en la película de Arráncame la Vida) y en principio
el nombre de la plaza era en su honor al ser uno de los principales
inversionistas. Don Manuel con tino sugirió cambiar el nombre.
La
México es la más grande y cómoda del mundo, sus asientos numerados de
sol y sombra con respaldo representan un confort que no ofrecen plazas
como Madrid o Sevilla, la plaza es capaz de albergar a más de 42 mil
aficionados como se pudiera verificar el 17 de febrero próximo en la
actuación de Pablo Hermoso.
El
primer lleno no fue de personas sino de costales para verificar la
resistencia del inmueble, posteriormente unos valientes soldados
hicieron la prueba que afortunadamente fue exitosa.
La
primera vuelta al ruedo la dio el arzobispo Primado de México Luis
María Martínez el día que roció su ruedo con agua bendita.
Terminada
la primera temporada de novilladas Moisés Cosío compró el inmueble y
hoy en día su hijo Antonio es el propietario que renta a la empresa que
encabeza Rafael Herrerías Olea asociado con Miguel Alemán Magnani y
gestionan el inmueble desde hace más de 20 años en los que han venido
los toreros más importantes de cada época de México y de todos los
países taurinos.
El
torero más taquillero de la actualidad José Tomás, recibió la
alternativa en la plaza México de manos de Jorge Gutiérrez y de testigo
Manolo Mejía con toros de Xajay el 10 de diciembre de 1995. Otra gran
figura Julián López El Juli debutó de novillero en México y en la misma
fue gran triunfador de la temporada de novilladas 1997, su máximo logro
en esa categoría en La México fue la faena de indulto al novillo
Feligrés (de La Venta del Refugio) así se llama su finca en España.
Perlas de una larga historia.
La primera corrida se celebró el 5 de febrero de 1946 con Luis Castro El Soldado, Manuel Rodríguez Manolete y Luis Procuna con toros de San Mateo de Antonio Llaguno. El primer toro se llamó Jardinero, la primera oreja la recibió Manolete, la segunda en esa tarde Luis Procuna y desde entonces (para los aficionados taurinos) en ella como en otras plazas del país respira México.
La primera corrida se celebró el 5 de febrero de 1946 con Luis Castro El Soldado, Manuel Rodríguez Manolete y Luis Procuna con toros de San Mateo de Antonio Llaguno. El primer toro se llamó Jardinero, la primera oreja la recibió Manolete, la segunda en esa tarde Luis Procuna y desde entonces (para los aficionados taurinos) en ella como en otras plazas del país respira México.
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