Páginas
▼
viernes, 26 de abril de 2013
¡LOS IMPONDERABLES!
Óscar López Gamboa*
Toda actividad o expectativa desarrollada o creada por el hombre, estará forzosamente supeditada a él o los imponderables, que incurran o surjan en el evento mismo y eso precisamente, es lo que ha sucedido en la agenda profesional del matador de toros Julián López “El Juli”, misma que resultó afectada en su
totalidad sobre todo en lo que se refiere a, su periplo en ruedos mexicanos, durante el mes de abril y mayo respectivamente, a raíz del percance sufrido el viernes pasado en la plaza de la Maestranza de Sevilla, al estar lidiando de muleta al primer toro de su lote el cuál, le infirió una cornada grande en el muslo derecho
y al caer el torero herido sobre la arena, fue tan severo el golpe sobre su cara, que también algunas piezas dentales, resultaron dañadas al grado de aflojársele de las encías.
De igual manera su segunda actuación anunciada en la misma plaza para el día domingo 24 de abril, donde mataría toros de la famosa y legendaria ganadería sevillana de ¡Miura!, sé canceló y la empresa tuvo que contratar a otro matador, para suplir al diestro madrileño; a consecuencia del percance sufrido, posteriormente una vez que fue operado en el sanatorio del Sagrado Corazón de dicha ciudad, y aparentemente la intervención quirúrgica había resultado satisfactoria, surgió una complicación de
inflamación inusual en la herida y tuvo que ser sometido nuevamente a una revisión exhaustiva par cuál era la causa de dicha inflamación y era un sangrado interno, por lo que el doctor Mulet, cirujano en jefe de la plaza
sevillana, tomó la decisión de intervenirlo de inmediato. Para corregir aquella nueva lesión, que ponía nuevamente en riesgo, la salud y recuperación del paciente.
Pues bien, como menciono al principio del presente, las actuaciones mediatas contratadas por el apoderado del Juli, fueron a dar por tierra allá y aquí en nuestro país y todo el entorno del diestro, resultó afectado empezando con él en su físico, lo familiar, lo profesional, la auto-estima, las empresas que lo contrataron al no contar con su participación en sus carteles anunciados, les producen con toda certidumbre, pérdidas económicas, que aunque con suplirlo con otro torero de igual jerarquía o menos, les hace perder dinero ya invertido en publicidad y boletajes previamente vendidos al tener que devolver con toda probabilidad a los aficionados el dinero por aquellos boletos adquiridos y en el último de los casos, el nuevo diestro contratado, puede exigir lidiar otro encierro, al previamente solicitado por el torero inicial; como sucedió en el primer festejo de la Feria de San Marcos, en Aguascalientes, que al no venir Alejandro Talavante
No hay comentarios:
Publicar un comentario