Páginas

domingo, 1 de diciembre de 2013

Gran inicio de la Feria de Quito

Torosecuador.com
Tambillo es Quito, o viceversa da igual porque ese bello pueblo al sur de la capital nos acogió con enorme cariño, de ese que sabe a bueno, por ser honesto.

SONY DSC

Y en Tambillo se vivió una tarde de toros importante. Y decimos importante por varias cosas, entre ellas, porque se hizo realidad la Feria de Quito, completa, sin cortes de ningún tipo, después porque se vio alegría en los tendidos de saber que la tradición taurina está intacta entre los quiteños de corazón. Quito es taurino, no cabe duda, le duela a quien le duela. Y por ser taurino exige que se lo respete, a su pueblo y sus creencias y tradiciones.
La Feria abrió este soleado y templado sábado con casi media plaza llena de público,  más que meritoria considerando que era una novillada y en Latacunga había otra corrida simultáneamente.
El rejoneador novillero Sebastián Peñaherrera, y los novilleros de a pie, el mexicano Brandon Campos y el ecuatoriano Gabriel Cevallos, dieron el paseíllo y sortearon a bureles de las ganaderías de Peñas Blancas, El Arriero y Santa Coloma, en su mayoría de buen recorrido y nobleza, y uno con gran trapío, el segundo de Peñaherrera, de 420 kilos y muy serio, de la ganadería El Arriero.
El joven quiteño Sebastián Peñaherrera está forjando su carrera a pulso. Está clarísimo que el rejoneo le apasiona y dedica todo su tiempo. Cada presentación se le ve más aplomado y seguro de sí mismo. Hoy hizo una presentación meritoria y variada, con banderillas largas y corta, y con la banderilla de la rosa. Toreo a momentos con gran lucidez, llevando cerca de su jaca a sus toros.  En su primero cortó una oreja, mientras que en segundo paseó los dos apéndices en medio de una cerrada ovación del público presente, que mira con gran optimismo su prometedora carrera.

SONY DSC
El mexicano Campos vino a demostrar que es por algo que es puntero en el escalafón de novilleros en tierra azteca.  Mientras templaba y mandaba a sus novillos acomodaba su figura y lanceaba con cadencia y elegancia.  Su toreo fue variado y muy mexicano, sin olvidar los cánones clásicos del toreo puro. En su primero cortó una oreja, mientras que su segundo recibió el indulto exigido por el público y alguien más. El  novillo tenía clase, no cabe duda, acudió al engaño con nobleza y humillando en todo momento, pero mal armado con defectos en sus pitones, y  era impresentable para la Feria de Quito. Al final, el mexicano, paseó sus dos orejas y rabo simbólicos, en medio de sonados aplausos.

SONY DSC
El novillero ecuatoriano Gabriel Cevallos se presentaba después de un largo tiempo de preparación en México. Se nota que está más cuajado, aunque estuviera mejor si sus ganas no le hicieran perder su compás y los tiempos frente al toro. Torea bien con el capote, banderilla muy bien, siguiendo la escuela de El Fandi o Padilla, pero en la muleta se deja con el toro, deja que coja sentido y por ello recibe sendas volteretas, que por suerte las de hoy no pasaron a mayores. Cortó una oreja en su primer toro y palmas en su segundo.
Síntesis del Festejo: Plaza de Toros “San Francisco de Quito”, Tambillo Alto, provincia de Pichincha, con casi media plaza de asistencia, se lidiaron novillos de los hierros de El Arriero, Santa Coloma, Peñas Blancas, de variado juego y presentación, destacando el segundo novillo de la tarde, que fue aplaudido en el arrastre y quinto novillo que fue indultado por su clase, nobleza, aunque justo de presentación, mal armado, es decir con defectos en sus defensas. Sebastián Peñaherra: oreja y dos orejas; Brandon Campos: Oreja y dos orejas y rabo simbólicos; Gabriel Cevallos: Oreja y aplausos;
Incidencias: Los chagras, vaqueros de la zona respaldaron y exhibieron sus habilidades a la afición, lamentablemente no hubo la presencia de banda musical, lo que le quitó alegría a la tarde; el torero de plata, Juanjo San Martín, colocó el mejor par de la tarde; hubo cierta generosidad de la autoridad de plaza al acceder a conceder trofeos y el indulto a un novillo  que quizá no fue precisamente un ejemplar que poseía todas las condiciones indispensables como son nobleza, recorrido, fijeza, bravura y buenas hechuras, para ser indultado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario