'Para competir con las figuras hay que pasar una raya que un día sí pero todos los días quizá no sea capaz de pasar'

Eduardo Dávila Miura habla con Carrusel Taurino, entrevistado por Juan Ramón Romero

Dávila volvió con los toros de la 'casa' | Maurice Berho

MUNDOTORO

Madrid (España).  Eduardo Dávila Miura es un hombre feliz y orgulloso. Y ello se desprende en la entrevista que le realizó Juan Ramón Romero en el Carrusel Taurino. En el espacio de Canal Sur Radio el torero sevillano quiso recordar la tarde de su vuelta a los ruedos y a Sevilla, con la 'miurada':

'Me planteé disfrutar lo más posible dentro de la responsaibilidad y los momentos duros que viví antes de y durante esa tarde. Mis hijos me acompañaron en el hotel y en la plaza, llegar a la plaza y verme vestido de torero en la capilla, estar con los compañeros, con el público... Me lo tomo como una segunda oportunidad de hacer lo que más me gusta: torear en Sevilla. Sabía que iba a haber momentos duros, incluso en ese mismo día pero me mentalicé pensando que que yo estaba ahí proque había querido y nada me iba a quitar esa ilusión. 'Esto es duro sí, pero porque yo he querido. Yo me he apuntado a esto'. Fueron muchos sentimientos, también me acordé de mi abuelo, pero ninguno me sacó de la tarde'.

Eduardo Dávila quiere transmitir su felicidad y lo hace con un mensaje de agradecimiento: 'Agradezco a todos los profesionales y aficionados esa unanimidad que parece conseguí. Pude transmitir mis sensaciones queridas desde que cerré el compromiso hace casi un añó. Y era un compromiso: iba a triunfar no simplemente a matarla'.

'Cuando maté el primer toro, complicado en Miura, noté buenas sensaciones, había controlado la situación', comenta Dávila a Juan Ramón Romero. Recuerda que 'sólo pedía que se calmara el aire y ayudara el segundo toro. Mi deseo era pegarle 15-20 pases despacio como creo que soy capaz de pegárselos ahora. Los toros en el campo me han hecho ver que soy mejor torero ahora que antes'.

Sevilla invita a pensar en el futuro. El torero se frena: 'Mira, Juan Ramón, mi apoderado Roberto Espinosa me decía 'qué tranquilidad no estar preocupado por cerrar ahora otras corridas. Sonaba el móvil y pensaba, lo cojo o no lo cojo'. Con todo, reconoce que hay una cita especial de la que no reniega: 'La México. Me está mirando mi mujer, pero siempre lo he dicho. No confirmar allí se me quedó dentro como torero. No sé si se cuadrará y si se hace, cuándo... pero me haría ilusión. Hasta entonces, ninguna. De verdad. Porque sé cuál es mi lugar y para competir con las figuras hay que traspasar una raya que el domingo sí la pasé pero todos los días quizá no sea capaz'.