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viernes, 24 de julio de 2015

LA CRÓNICA DE VALENCIA: La madurez de Talavante no pudo con la línea de la verdad

Talavante se inspiró en tercero y sexto, Morante no cruzó la línea de la voluntad y Finito, tras detalles, ofreció un espectáculo bochornoso con la espada escuchando tres avisos

 La madurez de Talavante no pudo con la línea de la verdad
JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO

Cualquier espectáculo con importancia social que se precie podría guiarse por tres pilares: emoción, masificación e interés económico. Así lo es y así ha sido en una historia a la que el toreo ha ido parejo pero sin amoldarse a tiempo a los cambios que ésta ha exigido. También a 2015, donde dos figuras y un torero veterano hicieron el paseíllo en Valencia con la cabeza bien alta aún muy a su pesar de la que les está cayendo políticamente encima. Y esa fue la pena de una tarde que se esfumó entre los detalles: que el aficionado que sufrió la línea del aburrimiento hoy en Valencia es el mismo que el lunes tendrá que defender esa línea aburrida en favor de los que allí se jactaron sin triunfo ante los virtuosos de Victoriano.

Esta era la parte triste, porque la alegre la copó un Talavante al que el alma le está dictando en el presente todo lo que su historia ha soñado. Lo hizo con el capote en el tercero, al que recibió en el tercio para ir meciendo con el corazón los vuelos de la verdad a pies juntos y rematar airoso buscando los recursos del envés de su capote. Fue aperitivo el galleo y sabroso cóctel el inicio muleteril de hinojos haciendo humillar al de Toros de Cortés. A partir de ese momento todo fue deleite del extremeño por ambas manos, conjunto sincero y valeroso de un Talavante que está encontrando el sitio de la verdad a base de ir parejo a lo que su corazón dicta. Lo demostró en naturales a ralentí que tapaban la contrariedad de un toro que de inicio se mostró reservón y de epílogo mansurrón. Cosas de la búsqueda brava que el bueno de Victoriano siempre lleva en mente. 

Reiteró su temporadón con un sexto para apostar. Se plantó a torear de verdad a la verónica ante el cierraplaza pero sólo fueron dos lances los que pudo dejar. Entretanto, un comprometido Trujillo capote en mano –que había sido ovacionado en el tercero- y un pleno Manuel Cid ovacionado a caballo honraron la profesión plateada. Se puso a torear Talavante como si no hubiera mañana primero por estatuarios para proseguir por ambas manos con la ilusión novilleril con la que está afrontando el 2015. Y se pidió una oreja que el palco no concedió. 

Protestado por su baja presentación fue el segundo de la tarde, con el que sólo pudo dejar dos verónicas bellas Morante. Dos tandas a diestras parecieron ser plato de buen gusto para el morantista de a pie, pero todo fue somnolienta realidad de la que despertó Valencia cuando el cigarrero tomó la zurda, el pitón que sentenció la masedumbre del animal y, por ende, el silencio sepulcral de José Antonio. No tuvo recursos Morante para hacerle frente a un quinto que exigía un punto más de compromiso. Se le fue el aire en el inicio de faena para escuchar el broncazo tras probaturas pro ambos lados de un toro para cruzar la línea. Antes, paró el tiempo a la verónica en media docena de ellas de mentón en pecho, hocico humillado sobre la seda y templada ejecución del único momento de brillantez del de La Puebla ante su segundo. 

A estas alturas nadie duda de la verdad de la carrera de un Juan Serrano que derrocha magisterio en compostura, concepto y ejecución. Y es que torear un toro a placer, imprimir la personalidad de dos décadas y media frente al animal más bello del mundo y sentirse cuerpo a cuerpo con una muerte afligida de dos "victorianos” a medio gas no debe tener precio. Lo que sí debe o debería tener es dar un espectáculo bochornoso con la espada para escuchar los tres avisos. No es el Fino tío de mediocridad y hoy su espada consiguió que así fuera el resultado final de una actuación a la altura de los grandes califas. Y un faenón sin espada no es un faenón. 

Y es que cuando la verdad no puede con la línea del aburrimiento, a pesar de que el ganado no terminó de ser malo, es tiempo de replantearse muchas cosas. Porque hoy el toro de las figuras se para en la segunda tanda…

FICHA DEL FESTEJO


Plaza de toros de Valencia. Tercera de la Feria de Julio. Corrida de toros. Más de dos tercios de entrada.

Seis toros deVictoriano del Río.

Juan Serrano "Finito de Córdoba"(Azul e hilo blanco): Silencio tras dos avisos y pitos tras tres avisos

José Antonio "Morante de la Puebla"(Azul pavo y oro: Silencio y bronca

Alejandro Talavante(Gris perla y oro): Ovación y vuelta al ruedo tras petición y aviso

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