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martes, 1 de septiembre de 2015

López Simón: 'La apuesta es alta pero voy a ganar'


Su mirada mezcla inocencia e instinto depredador. Nobleza y ansiedad por expresar. La de un torero joven y hambriento que siempre quiere más. Sólo así se explica su explosivo final de temporada tras su lanzamiento en mayo en Las Ventas con dos Puertas Grandes en 20 días: Madrid en Otoño, su confirmación en Nimes, Albacete, Sevilla o Zaragoza le esperan ahora como colofón de su año más especial. Para empezar, este domingo se anuncia en solitario, y el rejoneador Galán por delante, con cuatro toros de Jandilla a las puertas del Foro, en Aranjuez, que recupera la tradicional Corrida del Motín.
Para Motín, el de López Simón en este 2015...
 
Nunca pensé que el destino me guardaba algo tan bonito. El viento sopla a mi favor pero hay que mantener la calma, seguir el camino e intentar mejorar. 
 
¿Dónde nace la idea de anunciarse en Aranjuez?
 
Tenía ganas de hacer algo bonito, distinto, en una zona cercana a Madrid. Es una fecha emblemática, en un marco histórico y cultural como es Aranjuez. Se trata de un agradecimiento a la afición y a todo lo que me está regalando el toro.
 
Con lo que le espera por delante, no había necesidad...
 
Cuando aparece la necesidad, todo va acelerado, no puedes marcar tus tiempos y eso suele ser desastroso. Si uno hace las cosas por convicción, todo sale mejor. 
 
¿Y el cuerpo le pedía también regresar a Madrid en Otoño? 
 
Madrid es la plaza en la que más miedo paso, la que más me quita el sueño y la que más nervios me hace pasar... Pero también con la que más sueño. Y siento que le debo algo a Madrid. Es mucha responsabilidad, pero también una motivación extra.
 
Para sueño, confirmar en Nimes con Castella y Manzanares.
 
No he pisado nunca esa plaza pero he pensado mucho en ella. Poder debutar junto a dos figuras es maravilloso. Estoy en una nube y me imagino ahí por mucho tiempo. 
 
Y después Albacete, Sevilla Zaragoza...
 
Es lo que yo buscaba. Sólo deseo que pueda seguir disfrutando de la conexión con el animal a partir de la entrega. Y consciente de que llegarán días difíciles.
 
Pocos lanzamientos de jóvenes promesas se han rodeado de figuras como le está pasando a usted.
La parte mala es que me he quedado con ganas de hacer el paseíllo en sitios como Bilbao, Santander, Burgos... El sueño de niño es torear en las grandes plazas y con los mejores toreros. Y al igual que con mi forma de torear, en el enfoque de mi carrera decidí hacer lo que sentía. A veces tengo una inestabilidad anímica que tengo que cuidar y buscar que cada vez que me vista de torero sea con la máxima motivación.
 
Pero es complicado mantener ese nivel cada tarde... 
 
Si no lo buscas, no va a parecer nunca. Sé que es apostar alto, pero el toreo es eso. Ya que te juegas tu vida, que te la juegues para ganar.
 
Ganar prestigio... y dinero.
 
No me motiva lo material pero es verdad que, como torero, uno disfruta cosas como poder llegar al sastre y tener dinero para pagarle. Y no tener que pedir a nadie o esperar a que me devuelva Hacienda para pasar el invierno. 
 
¡Cómo han cambiado las cosas de un año para acá...!
 
Mucho. Pero tenía algo dentro que no veía la forma de sacarlo. Me vine muy abajo.
¿Tanto como para decir "no" en 2014 a Madrid sin tener nada?
 
En la vida tienes que cuidar tu interior. Puedes tener un caramelo malo, pero si le pones un envoltorio bonito, parece que todo va bien. Cuando lo abres, es una porquería.
 
¿Y su caramelo era malo?
 
Aparentemente estaba bien, pero el caramelo no existía. No se puede vender un envoltorio si dentro no hay nada. Yaceptar la propuesta hubiera sido defraudar al aficionado y a mí mismo.
¿Y qué ha cambiado ahora?
 
Mi interior y mi espíritu. Necesitaba quitarme suciedad alrededor de mí para poder sentir y hacer sentir, que es como el aficionado se puede emocionar.
 
Pues parece que ha liberado hasta la cintura. ¿Qué fue de aquel concepto más rígido y agarrotado de tiempo atrás?
 
El toreo tiene que ser plasticidad, armonía, belleza... Lo único que tiene que estar rígido son las piernas. Un día decidí hacer lo que me saliera de dentro. Y desde la imperfección empecé a canalizar los sentimientos para armonizar mi cuerpo y mi toreo. 
 
El toreo es Cultura... ¿Quién inspira a López Simón?
 
Me gusta darle mi propio sentido a la música. Imaginarme escenarios, imaginar... Me gustan los artistas que crean letras para soñar como Calamaro y Sabina.
 
¿Y si le pregunto de política?
 
Nos han decepcionado tanto que de la política no espero nada. El otro día Vargas Llosa decía con razón que nos va así de mal porque a las grandes mentes con ideas y talento no les atrae nada la política. Y en el poder hay mentes obtusas que, en vez de crear, prohíben.

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