Páginas

martes, 20 de septiembre de 2016

El magistral talento de Ponce, mando de seda en Logroño

Dos orejas para el valenciano frente a una noble aunque descastada corrida de El Pilar


Firme derechazo de Enrique Ponce a un toro de El Pilar. EFE



Dos faenas caligráficas y ejemplares de Enrique Ponce frente a dos toros de El Pilar muy nobles pero muy justos de raza marcaron la tercera de abono en Logroño. Dos faenas superiores del valenciano que exhibió su temple, su mimo, esa forma tan sugerente de atacar con las muñecas de poder con la sutilidad del alma. Dos orejas, peticiones de segundo trofeo en ambos turnos y una estela de magisterio que impregnó de inteligente elegancia la tarde.

Enrique Ponce cortó una oreja al primer toro tras un ejercicio de versatilidad y magisterio. Un animal con buena condición y justa fortaleza frente al que el valenciano obró dos milagros: sostenerlo en su altura y ligarle tandas bellísimas de muletazos. Una labor tan creativa como inteligente, propia de un torero privilegiado. Emoción y dulzura. Aseguró el premio con una estocada a cámara lenta. Más de lo mismo frente al cuarto, al que volvió a meter en cintura con cadencia y mando de seda. Puro embrujo poncista frente a otro toro muy noble pero de escaso fuello. Sacó fondo por la forma de administrarle un Ponce imperial. Triunfo redondo del valenciano.

No tuvo más historia la corrida de El Pilar. La noble condición no anduvo acompañada ni de raza ni de fuerza. Ni un entonado y metido Manuel Jesús "El Cid" ni un decidido Miguel Ángel Perera tuvieron posibles para elevar la intensidad de sus faenas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario