El de Camas dejó buenas sensaciones en Las Ventas, en una tarde en la que a punto estuvo de cortar una oreja
APLAUSOS
Esaú, el pasado domingo en Las Ventas. (Foto: Julián López) |
Además de Las Ventas, la temporada para el sevillano está siendo positiva, a pesar de los pocos contratos. “Ha
habido tardes muy buenas como la de Tudela, donde cuajé un toro de
Miura y aunque lo pinché, le corté la oreja. En Sepúlveda corté tres
orejas y rabo, fue una tarde especial por todo lo que ese pueblo
conlleva para mí, por el recuerdo de mi amigo Víctor Barrio. En América
también he podido triunfar, sobre todo en Venezuela, donde en Mérida
salí a hombros y en Tóvar indulté un toro. Ahora voy a volver a México,
donde torearé algunas corridas, y a Venezuela, donde estaré en muchas de
las ferias importantes de aquel país”.
Está convencido de sus posibilidades y de que atraviesa un buen momento tras seis años de alternativa. Como él mismo afirma, “soy
uno de los toreros jóvenes que puedo sumarme a esa lista de nuevos
valores y creo que tengo condiciones para hacerlo antes o después.
Atravieso un momento de madurez muy bueno en el que, a poco que me
embista un toro como pasó el otro día en Madrid, puedo darle un giro a
mi carrera”, concluye.
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