- Hace un año, recién asumido el poder, ustedes se proclamaban como el "Gobierno del cambio de la Tauromaquia". ¿En qué ha cambiado el toreo o Madrid desde entonces?
- Referente a Madrid, yo había dicho que no se trataba de hacer una revolución pero sí una evolución. Iniciamos una serie de cambios como la creación de la Corrida de la Cultura con el objetivo de reivindicar que somos Cultura. Este año seguimos la evolución con la implantación de la Corrida de las Seis Naciones para subrayar el aspecto internacional de la Tauromaquia. Están todas las figuras del toreo en este San Isidro, lo cual no es fácil. Y todos los toreros emergentes. El año pasado tuvimos unos 100.000 espectadores más. Esta empresa cumple con su deseo de hacer evolucionar Madrid.
- ¿Cómo afecta la dimisión de Cristina Cifuentes en el futuro inmediato de la plaza?
- Es una pregunta a la que soy incapaz de contestar. Depende de quién vaya a tomar el relevo. Si es el consejero Garrido, nuestro interlocutor desde que empezamos, se supone que se seguiría de la misma manera. En un año habrá elecciones. Sabemos que hay partidos radicales prohibicionistas. Debemos explicar lo que significa el mundo del toro como economía, como arte, como Cultura. Esto ha faltado en el sector taurino, la labor pedagógica. La tauromaquia es un vector ecológico al 100 por 100.
- Hay un proyecto de reforma pendiente en Las Ventas y un presupuesto aprobado, que va con un retraso considerable. ¿Qué puede pasar?
- Es la primera vez que tomo la palabra en este asunto. Nuestra empresa Plaza 1 se encontró en una situación casi imposible. Quisimos dejar tiempo al tiempo. Concursamos con un pliego de condiciones que no corresponde al contrato que hemos firmado, y este contrato nos prohíbe la plena explotación de la plaza de toros. Consideramos desde un principio que debíamos dar prioridad a la adaptación de Las Ventas a las normas de seguridad actuales y facilitar, sin polémica, que se hagan estas obras para el futuro de la plaza y de la fiesta. Estamos muy perjudicados, económicamente hablando. Hay que reequilibrar el contrato y reformar la plaza. Quiero pasar un mensaje a la afición: está claro que hay que proteger la temporada y de hecho se hace. Pero que no se equivoquen los aficionados. Lo peor que le podía pasar a la plaza de Madrid es no adaptarse a los tiempos y a las normas actuales. Sugiero que se dé prioridad absoluta y total a la readaptación de la plaza Estamos haciendo espectáculos taurinos en una plaza que no corresponde a la normativa de seguridad.
- Sinceramente, ¿existen en su empresa la necesidad de cerrar Las Ventas en verano y la idea de establecer una temporada estival de novilladas por los pueblos de la Comunidad?
- Pero no como consecuencia de las obras. Tengo la convicción de que para el futuro hay que replantear el concepto de plaza de temporada, que es muy modulable. Por sistema, de manera dogmática, que haya cada fin de semana un espectáculo mediocre al que no van casi ni los abonados, y hay más asiáticos que aficionados, es enviar un mensaje internacional muy negativo. Lo que hay hacer es potenciar las dos ferias de Madrid [San Isidro y Otoño] y si acaso las fechas tradicionales. Hay que buscar un sitio para la programación de novilladas. Menos novilladas en Las Ventas y más en los pueblos de la Comunidad de Madrid. Hay que tener una reflexión de fondo...
- Volvemos a la política empresarial de Plaza 1 en Las Ventas. Causa la impresión de ser continuista de la gestión de Taurodelta.
- No estoy de acuerdo. Porque el antes de San Isidro es más fuerte. Porque hacemos un esfuerzo con las novilladas y que no haya novilleros no es culpa nuestra. San Isidro no es el San Isidro de Taurodelta. Ahí está la Corrida de la Cultura, la Corrida Internacional, un mano a mano El Juli-Ginés Marín, potenciamos la corrida de la Prensa, están todas la figuras.
- Pero a lo peor no en el número de tardes que deberían estar.
- Yo soy muy torerista. Respeto y admiro a las figuras del toreo. Pero también tienen su parte de culpa. Se han encerrado en conceptos muy estrechos. Todos quieren la misma ganadería. Hay tres o cuatro, no más, para ellos. Se miran mucho en el espejo del otro, con quién torea éste, no quiero torear con este otro... Los costes son muy elevados. Y creo que deberían ganar el doble. Pero no hay dinero.
- Ni la libertad de precios en Las Ventas, intervenidos por la Comunidad de Madrid.
- Exactamente. No es el mismo coste montar una corrida de figuras que una corrida más modesta. Y menos mal. Porque se pierde tanto dinero en una corrida de figuras que se compensa con las otras. Aquí está todo encorsetado de manera estúpida. Yo he inventado muchas cosas y tengo un discurso agresivo e innovador.
- Pues mi impresión es que el Simón Casas productor, ensoñador y creativo ha dado paso a un Simón Casas rentabilista.
- No es esto. Si el productor Simón Casas hubiera tenido la insensatez de querer cambiar las cosas demasiado rápido en Madrid me hubieran cortado la cabeza el primer año. Tenía que darle prioridad al respeto de la ética de la Tauromaquia y la personalidad de Madrid. ¿Cuáles son los empresarios que dicen que todo está mal, que hay que cambiar los Reglamentos y revisar los conceptos de plazas de temporada? Soy el único. ¡No me diga que he perdido mi frescura! ¡No me diga que he perdido mi pasión! Lo que pasa es que hay gestionar la pasión. No he cambiado de naturaleza.
- ¿Cree que con este San Isidro va a mantener los abonos del año pasado?
- ¿Los abonos? Más o menos. Hay un concepto que toca la coyuntura sociológica. En todas las plazas se observa que bajan los abonos pero eso no quiere decir que baje la cantidad de público. Lo que pasa es que el público elige festejo. Sucede en Sevilla, en Madrid y en Nimes. Si lee los carteles de San Isidro hay más carteles con argumento que favorecen la venta de entradas sueltas. No sé si mantendremos el abono pero que vamos a tener más público, sí.
- ¿Está obsoleto San Isidro como modelo?
- San Isidro no. No sólo no lo está, sino que demuestra la fuerza de la Tauromaquia en esta época. Que tiene una capacidad de convocatoria extraordinaria. A pesar de todos los pesares. El problema no sólo son los antitaurinos sino las nuevas relaciones entre el hombre y el animal que anuncia un cambio de civilización. No me importaría que incluso hubiera tres o cuatro festejos más. No tocaría San Isidro, aumentaría Otoño..
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- Eso ya lo dijo el año pasado, que daría nueve corridas en Otoño...
- Pero no pudo ser por las circunstancias. El interés de todo el mes de septiembre aumentó con los duelos toristas. Y eso también es otoño. Ha habido muchos cambios. Por eso no puedo admitir que me diga que soy igual que Taurodelta.
- ¿Ya no es usted el empresario fetiche de José Tomás?
- Yo no soy Dios, Dios es él.
- Una tregua: alabemos, señor Casas, su política de marketing en Madrid.
- Eso forma parte del cambio. Las galas de presentación de San Isidro tuvieron mucho impacto mediático. Y las campañas que hacemos buscan salirse de los parámetros habituales de la comunicación taurina.
- A su socio o colaborador Ramón Valencia le recordaron los tendidos de la Maestranza la rebaja del IVA al 10% que no se aplica.
- Es una estupidez. El Estado ha bajado el IVA del espectáculo directo. Del cual forma parte la tauromaquia Para poder aportar oxígeno económico para hacer inversiones se bajó el IVA no para bajar el precio de las entradas de manera lineal. Cultura ha manifestado que no hay relación causa efecto entre la bajada del IVA y la bajada de las entradas. Ahora le toca al empresario invertir. Nosotros ya ofrecimos una rebaja del 10% a los abonados el año pasado.
- Que ahora se compensa con la bajada del IVA.
- Y el 20% en Otoño. Cuando se subió el IVA, el sector no subió el precio de las entradas. Además el sector está en grandes dificultades económicas. Conozco pocos empresarios taurinos que ganen dinero porque los costes son tremendos. La rebaja tiene que ser para mejorar la calidad del espectáculo no para rebajar el precio de las entradas.
- Montoro no dice eso: "La rebaja del IVA no se hizo para aumentar los márgenes de beneficio del empresario sino para que repercuta en el espectador".
- No creo que rebajar un euro el precio de una entrada sea el problema. Sino que se hagan carteles mejores. La tauromaquia no es un espectáculo caro.
- Madrid, en concreto, es barato.
- Un joven puede verse los 80 espectáculos de la temporada por 100 euros. Espero que la próxima vez que se haga un pliego de condiciones en Madrid consulten con el sector. Y que exista un análisis previo del mercado. Los precios están intervenidos y limitan la libertad del empresario. El canon por el piso de plaza debería ser a coste cero y habría que redactar los pliegos sólo exigiendo criterios puramente profesionales. Que en Madrid dejamos a la Comunidad 2.800.000 euros. Si no hay dinero para la producción de la fiesta de los toros, se acaba esto. Esto es Cultura, pero... ¿Aquí quién coño es culto?
- ¿Es el Simón que soñaba ser como empresario de Las Ventas o el que la realidad le ha impuesto?
- Sigo fiel a mí mismo. Tengo los mismos referentes éticos y pasionales. No es la feria que sueño. Crearía una corrida sinfónica, otra de arte y ensayo, tres o cuatro días transgresores... El arte es una luz invisible que permite la evolución de las sociedades.
- Permítame que le pregunte por la ausencia, la única de San Isidro una vez autodescartados José Tomás y Morante: Urdiales. ¿De verdad no cabe un torero de su corte en 34 tardes?
- No hubo acuerdo económico. Igual que cuando se triunfa se sube el dinero, si el triunfo no sucede hay que amoldarse.
- Era un recorte del 50% respecto al año anterior.
- Sinceramente, no me acuerdo.
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