Calita se encuentra estable y sin fiebre

La operación que le hicieron anoche en Pachuca fue exitosa

Al Toro México

Ernesto Javier "Calita" se recupera satisfactoriamente de la fuerte cornada sufrida ayer en la plaza "Vicente Segura" de Pachuca, de la que fue operado en la Clínica Intermedia, donde permanece ingresado a la espera de que transcurran las 72 horas de rigor y que los médicos puedan evaluar su evolución.

"Pasé la noche tranquilo, aunque con los dolores lógicos de la cornada pero no he tenido fiebre y me siento bien. Al principio, en la plaza, pensaba que era algo de menor gravedad, a pesar de que el golpe que tuve fue muy fuerte, y aparentemente era una cornada chica. Pero cuando los doctores me exploraron aquí en el hospital, se encontraron tres trayectorías: una de 30 centímetros y otras dos de doce centímetros cada una", puntualizó Calita.

El percance ocurrió durante la lidia del cuarto toro de la tarde, después de que lo había recibido con una larga cambiada de rodillas, y tuvo los arrestos de mantenerse en el ruedo hasta el final de la lidia, no obstante que estaba calado.

"Estoy muy contento por cómo se desarrollo la tarde de ayer, y el único reclamo que me hago es haber pinchado al primer toro, porque pude haber cortado dos oreja. Pero toreando, en general, me sentí muy bien y cada vez que toreo me siento más seguro y con mayor madurez", señaló.

Calita venía con una racha de corridas muy interesante, pues ésta de ayer fue la número diez de uno de los años en que más ha toreado, y de cara a su próxima presentación en la Plaza México, prevista para el domingo 6 de enero de 2019, donde reaparecerá después de una prolongada ausencia de nueve años.

"Ya estoy pensando en la siguiente fecha que tengo en mi agenda, que es el domingo 11 de noviembre en Teocaltiche, y no la voy a perder porque tengo tres semanas por delante para recuperarme al máximo y hacer campo, así que vamos hacia adelante con mucha afición", afirmó.

Cabe recordar que fue en dicho escenario donde recibió la alternativa de manos de Manolo Mejía y ante la presencia de José María Manzanares, el 22 de noviembre de 2009, con toros de Julio Delgado.