INAUGURADO POR MARCOS PERÉZ JIMÉNEZ
Y Germán D’ Jesús Cerrada
El puente sobre el río Chama, con la extensión más grande construída en Venezuela para el momento, fue una obra catalogada por la comunidad internacional como todo un desafío de la ingeniería en su tiempo, con una longitud de 630 metros nunca antes lograda, una calzada de 8 metros de ancho con banquetas de ambos lados de 60 centímetros de ancho, una altura de 27,4 metros, descansando sobre 5 arcos de medio punto de 112 metros de luz cada uno.
La construcción del puente ubicado sobre dos promontorios salientes de la montaña fue contratada entre 1951 y 1952, lográndose en tiempo récord. La obra se inició el 12 de marzo de 1954, anunciada por el ingeniero Julio Bacalao Lara, Ministro de Obras Públicas de la dictadura, quien ocho meses después, el 12 de noviembre, informó de su culminación. Se trabajaban tres turnos durante las 24 horas diarias.
El puente fue fabricado por la compañía alemana Lofnomafld, de Hamburgo, siendo trasladados los tramos de la estructura en barco hasta La Guaira, y de allí en gandolas hasta donde se encuentra el estribo del otro lado de El Vigía, pero una de las estructuras metálicas se quebró por alguna razón. Con la premura de que la obra tenía que estar lista para el 2 de diciembre de 1954, la empresa italiana Moviterra empezó la construcción del puente, y cuando estaba al borde de la quiebra fue adquirida por la constructora venezolana Excavaciones y Riego, C.A. del ingeniero Alberto Diaz González, quien terminó su construcción, y además le tocó hacer un terraplén de ese lado para poder hacer el montaje de la estructura.
Cuentan testigos de la construcción del puente que Pérez Jiménez vino en varias oportunidades a supervisar los trabajos, estaba muy interesado que el puente se construyera en el menor tiempo posible.
La inauguración del puente sobre el río Chama se celebró el 8 de diciembre de 1954 por el presidente de la República Marcos Pérez Jiménez, acompañado por el Ministro de Obras Públicas Julio Bacalao Lara y el gobernador Vicente Tálamo. La obra fue bendecida por Monseñor Acacio Chacón, Arzobispo de Mérida, y el padre Alarcón, párroco de Mesa Bolívar. El Vigía no contaba con una iglesia en forma ni cura párroco.
El día de la inauguración, el General Pérez Jiménez llegó manejando su propio vehículo Mercedes Benz Alas de Mariposa, deportivo, antes que los motorizados de la caravana presidencial. En esa época el Colegio San José tenía un Grupo de Caballería, siendo los caballos trasladados en camiones y los muchachos en autobús para que hicieran un desfile a ambos lados del puente.
En la foto protocolar del día de la inauguración, de autor desconocido, de izquierda a derecha: Tcnel. Alberto Paoli Chalbaud, jefe de la Casa Militar, Dr. Joaquín Mármol Luzardo, Rector de la ULA, Monseñor Alejandro Fernández Feo, Obispo de San Cristóbal, Monseñor Acacio Chacón Guerra, Arzobispo de Mérida, General Marcos Pérez Jiménez, Presidente de la República, Dr. Raúl Soules Baldo, Secretario de la Presidencia de la República, Ing. Alberto Díaz González de la empresa constructora y Dr. Julio Bacalao Lara, Ministro de Obras Públicas.
La recepción al dictador se celebró en la Hacienda Onia del General Vivas González. Después el General Vivas González se la vendió a Manuel José Fuentes Gilly y éste a Gilberto Mendoza Arriaga.
Afirma Eudes Blanco, “Las transformaciones producidas por la carretera Panamericana en El Vigía, en el municipio Alberto Adriani y la zona Sur del Lago de Maracaibo, fueron indiscutibles, de ahí que 66 años después de la inauguración del puente Chama éste sea el símbolo cultural del desarrollo y progreso de la región”.
Más que enlazar dos tramos de la carretera Panamericana: Caja Seca–El Vigía y El Vigía–La Fría, permitió la culminación de esta importante vía iniciada en 1948, que origina la conexión por carretera desde Caracas hasta San Cristóbal, integrándose así el occidente con el centro del país, y constituyendo una ruta de comunicación interna de incalculables beneficios que contribuyó a elevar el coeficiente económico del país.
Con la inauguración del puente sobre el río Chama, que enlazó la carretera Panamericana, lo que permitió el desarrollo del Sur del Lago con el surgimiento de pueblos y ciudades, constituyendo un impacto económico, así como un avance de la producción agrícola y agropecuaria para el país.
Una de las ciudades que más se benefició con la inauguración del puente sobre el río Chama fue El Vigía. Su transformación extremadamente acelerada, cambió de ser una pequeña aldea a convertirse en el puerto terrestre del occidente del país. En lo demográfico, la aldea de El Vigía en 1950 tenía una población de 1.668 habitantes, y para 1961 alcanzó los 8.874. A seis meses de la inauguración de el puente, El Vigía pasa de aldea a ser la capital del municipio Alberto Adriani (14 de junio de 1955), y una década después la capital del Distrito Alberto Adriani (12 de febrero de 1966).
Fuente y fotografías: Fundación Arquitectura y Ciudad y Matria Vigiense.
La construcción del puente ubicado sobre dos promontorios salientes de la montaña fue contratada entre 1951 y 1952, lográndose en tiempo récord. La obra se inició el 12 de marzo de 1954, anunciada por el ingeniero Julio Bacalao Lara, Ministro de Obras Públicas de la dictadura, quien ocho meses después, el 12 de noviembre, informó de su culminación. Se trabajaban tres turnos durante las 24 horas diarias.
El puente fue fabricado por la compañía alemana Lofnomafld, de Hamburgo, siendo trasladados los tramos de la estructura en barco hasta La Guaira, y de allí en gandolas hasta donde se encuentra el estribo del otro lado de El Vigía, pero una de las estructuras metálicas se quebró por alguna razón. Con la premura de que la obra tenía que estar lista para el 2 de diciembre de 1954, la empresa italiana Moviterra empezó la construcción del puente, y cuando estaba al borde de la quiebra fue adquirida por la constructora venezolana Excavaciones y Riego, C.A. del ingeniero Alberto Diaz González, quien terminó su construcción, y además le tocó hacer un terraplén de ese lado para poder hacer el montaje de la estructura.
Cuentan testigos de la construcción del puente que Pérez Jiménez vino en varias oportunidades a supervisar los trabajos, estaba muy interesado que el puente se construyera en el menor tiempo posible.
La inauguración del puente sobre el río Chama se celebró el 8 de diciembre de 1954 por el presidente de la República Marcos Pérez Jiménez, acompañado por el Ministro de Obras Públicas Julio Bacalao Lara y el gobernador Vicente Tálamo. La obra fue bendecida por Monseñor Acacio Chacón, Arzobispo de Mérida, y el padre Alarcón, párroco de Mesa Bolívar. El Vigía no contaba con una iglesia en forma ni cura párroco.
El día de la inauguración, el General Pérez Jiménez llegó manejando su propio vehículo Mercedes Benz Alas de Mariposa, deportivo, antes que los motorizados de la caravana presidencial. En esa época el Colegio San José tenía un Grupo de Caballería, siendo los caballos trasladados en camiones y los muchachos en autobús para que hicieran un desfile a ambos lados del puente.
En la foto protocolar del día de la inauguración, de autor desconocido, de izquierda a derecha: Tcnel. Alberto Paoli Chalbaud, jefe de la Casa Militar, Dr. Joaquín Mármol Luzardo, Rector de la ULA, Monseñor Alejandro Fernández Feo, Obispo de San Cristóbal, Monseñor Acacio Chacón Guerra, Arzobispo de Mérida, General Marcos Pérez Jiménez, Presidente de la República, Dr. Raúl Soules Baldo, Secretario de la Presidencia de la República, Ing. Alberto Díaz González de la empresa constructora y Dr. Julio Bacalao Lara, Ministro de Obras Públicas.
La recepción al dictador se celebró en la Hacienda Onia del General Vivas González. Después el General Vivas González se la vendió a Manuel José Fuentes Gilly y éste a Gilberto Mendoza Arriaga.
Afirma Eudes Blanco, “Las transformaciones producidas por la carretera Panamericana en El Vigía, en el municipio Alberto Adriani y la zona Sur del Lago de Maracaibo, fueron indiscutibles, de ahí que 66 años después de la inauguración del puente Chama éste sea el símbolo cultural del desarrollo y progreso de la región”.
Más que enlazar dos tramos de la carretera Panamericana: Caja Seca–El Vigía y El Vigía–La Fría, permitió la culminación de esta importante vía iniciada en 1948, que origina la conexión por carretera desde Caracas hasta San Cristóbal, integrándose así el occidente con el centro del país, y constituyendo una ruta de comunicación interna de incalculables beneficios que contribuyó a elevar el coeficiente económico del país.
Con la inauguración del puente sobre el río Chama, que enlazó la carretera Panamericana, lo que permitió el desarrollo del Sur del Lago con el surgimiento de pueblos y ciudades, constituyendo un impacto económico, así como un avance de la producción agrícola y agropecuaria para el país.
Una de las ciudades que más se benefició con la inauguración del puente sobre el río Chama fue El Vigía. Su transformación extremadamente acelerada, cambió de ser una pequeña aldea a convertirse en el puerto terrestre del occidente del país. En lo demográfico, la aldea de El Vigía en 1950 tenía una población de 1.668 habitantes, y para 1961 alcanzó los 8.874. A seis meses de la inauguración de el puente, El Vigía pasa de aldea a ser la capital del municipio Alberto Adriani (14 de junio de 1955), y una década después la capital del Distrito Alberto Adriani (12 de febrero de 1966).
Fuente y fotografías: Fundación Arquitectura y Ciudad y Matria Vigiense.
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