37 años del asesinato de Luis Carvallo Cantor

El Marzo Merideño

Germán D'Jesús Cerrada 

El viernes 13 de marzo de 1987, la ciudad de Mérida fue sacudida por un fuerte acontecimiento. En las inmediaciones de la avenida 4 "Bolívar" ocurrió un hecho traumático, apagándose la vida de un joven merideño estudiante de la facultad de ingeniería de la Universidad de Los Andes, quien se encontraba celebrando con sus compañeros la tradicional caravana de grado.

Luis Carvallo Cantor era el nombre de este joven quien caería sin vida a causa de un malentendido y gesto de intolerancia por parte del abogado Bernardino Navas, dueño de la casa en donde Carvallo Cantor estuviera orinando minutos previos de su deceso.

A raíz de este suceso que conmocionó a la ciudad estudiantil de Mérida, frente a la casa de Bernardino Navas se reunieron numerosos estudiantes que en minutos saquearon y volvieron cenizas todo lo que fueron consiguiendo.

El entierro de Luis Carvallo Cantor fue una verdadera manifestación de duelo universitario y del pueblo merideño quienes repudiaron el asesinato del joven estudiante, futuro ingeniero civil.

La protesta, como nunca se había visto en la ciudad de Mérida, duró cinco días. El gobierno nacional envió desde las ciudades vecinas efectivos militares con equipos antidisturbios. La ciudad era un polvorín, las tanquetas recién llegadas recorrían la ciudad, y desde cualquier edificio le lanzaban objetos contundentes. La ciudad fue militarizada, declarándose estado de sitio. Hubo toque de queda, con la presencia de los militares en las calles de Mérida enardeciendo más a los estudiantes y pueblo merideño. La fuerza pública no pudo acabar con las manifestaciones, el cansancio de días intensos de batalla agotó la protesta que poco a poco fue desapareciendo.

El Rector de la Universidad de Los Andes era el Dr. Pedro Rincón Gutiérrez, el Presidente de la República Jaime Lusinchi y el gobernador Carlos Consalvi Bottaro y el presidente de la FCU Rafael Mora.

En los despachos del rectorado y gobernador del estado se hicieron numerosas reuniones con la finalidad de buscar el fin de la protesta y acuerdos para el juzgamiento del asesino.

La revuelta se conoció con el nombre de “El Marzo Merideño” ya que le dio connotación nacional a Mérida. Además de las fuerzas públicas, llegaron numerosos dirigentes estudiantiles de todo el país.

Es a partir de esta fecha un grupo de líderes juveniles, entre ellos, Freddy Yépez, Esteban Padovani, Carlos Méndez, Caracciolo León, Rómulo Canelón, aglutinaron fuerzas como una organización social enfocada en defender los derechos de los estudiantes y los derechos del pueblo, formando lo que ellos denominaron una maquinaria de fuerza universitaria bajo el nombre de Movimiento 13 de marzo.