A San Cristóbal toros armónicos y de variada pelambre

Torera tarde en la ganadería Campolargo

Armonía y estampa en los toros que irán a San Cristóbal.

Jesús Ramírez "El Tato"

Entre frondosos árboles que abren el camino y espesa vegetación de agradable clima, nacen y crecen las reses de lidia de la ganadería Campolargo en el estado Yaracuy.

José Miguel Parra con temple al natural 

Allí esparce su esfuerzo la abogado Carmen Rosa Campolargo, siguiendo adelante con los sueños y legado que su padre Juan Campolargo emprendió en 1978 con la divisa verde y roja de la bandera lusitana.

En ése remanso de paz y esplendor estuvo el matador de toros José Miguel Parra en emotivo reencuentro con el campo bravo venezolano tras dos lustros por tierras aztecas dónde hace vida.

Tres bravas vacas de retienta dieron la cara por el hierro yaracuyano, en las muletas de César Vanegas, José Miguel Parra y su primo el novillero César Parra, que embistieron con limpieza, fuerza y movilidad a pesar de los años y peso.

Elocuente foto de pectoral de César Parra ante la mirada atenta de "Mancha"

César Vanegas con el oficio bien aprendido y gran conocimiento del quehacer con las vacas, Dios quiera que esa afición y vocación no desfallezca ante el cicaterismo de nuestras empresas, José Miguel Parra por su parte ratificando esas excelsas condiciones toreras incolumes con naturales de temple y aguante y la grata sorpresa de su primo César Parra, novillero aragueño de valor, dominio y estampa torera que merece ser tomado en cuenta con gran ilusión.

Fue una tarde muy torera, otras vacas quedaron dispuestas para la retienta, pero el astro sol se marchó abandonando con sus rayos la plaza de tientas.  Agradable compartir de guayoyo, pan y exquisito queso de la casa, con la expectativa desbordante por los toros que habrán de lidiarse en San Cristóbal el próximo enero, dónde el hierro yaracuyano ha sentido el triunfo de orejas e indultos.

Carmen Rosa Campolargo se faja en labores camperas

Era oportuno ojear en cercanías los toros que la recelosa ganadera lleva a la capital tachirense, con variada pelambre y armónica estructura. Libros y notas en mano prometen una gran tarde por  nuevos trofeos ganaderos, con los ojos llenos de brillo de la optimista ganadera que en esta tarde tambien disfrutó de la bravura de sus vacas y el buen toreo los matadores Vanegas y Parra y el novillero César Parra.