José Miguel Parra por unos días en el país reafirmando ilusiones toreras

José Miguel Parra con su familia en la bienvenida en el aeropuerto

Jesus Ramirez "El Tato"

El matador de toros José Miguel Parra tras una decena de años por tierras mexicanas, regresó ésta semana a su país en visita familiar y de refrescamiento de ilusiones.

Lujo en la tarde del grado con Enrique Ponce padrino.

Recordamos que José Miguel Parra recibió la alternativa durante la feria de San Sebastián, el 27 de enero de 2011 con Enrique Ponce, Manuel de Jesús "El Cid" y el rejoneador José Luis Rodríguez en el inolvidable cartel. El toro del doctorado se llamó "Platerito", número 50 con 458 kilos con el hierro de "El Prado".

Siempre activo en el campo mexicano.

De su calidad torera y valor conocen las plazas y afición de Merida, Tovar, San Cristóbal y Maracay, donde dejó la impronta de su plena entrega, profesionalismo y arte; pero ése toldo cardeno con borregas oscuras que se encubre en el ambiente taurino, impidió que el azul del cielo de esperanzas, vertiera con sus rayos el horizonte de este joven torero que sin más y sin abatirse, se marchó a México dónde hace vida sin apartarse de su mundo taurino de festivales y tentaderos y de maestro de una escuela taurina, siempre activo, ilusionado y preparado para volver a vestir esa segunda piel del traje de luces.

José Miguel Parra estará unos días compartiendo con familiares de Mérida y Maracay y con los amigos de siempre, leales al torero y su futuro y con esa hermosa Alba para nuevos y victoriosos amaneceres cuando el sol termina de salir.