CRIMEN DE LESA HUMANIDAD EN MERIDA?

Por: Rafael Augusto López R.

Hace unas semanas el Ingeniero y Profesor Universitario Julio César Centeno, participó en el programa de mayor audiencia en Mérida, Carrusel de la Fama que conduce el Ingeniero, locutor, periodista y empresario Néstor Trujillo Herrera, que se transmite los domingos de 1:00 a 5:00 pm por éxitos 100.9FM, cuando no le cortan la electricidad, para expresar sus puntos de vista sobre el proyecto que adelantan el gobierno nacional, el gobierno regional y una empresa  privada de nombre pro biodiversa, para desplegar 8 mil metros cuadrados de manto plástico en el pico Humboldt en el parque nacional sierra nevada, lo que es equivalente a 100 casas de 80 metros cuadrados cada una.

Esta operación afirma el Ingeniero Julio César Centeno, está plagada de irregularidades y mentiras. El ministro de eco socialismo Josué Lorca, mintió cuando declaró el 6 de diciembre del 2023, que la llamada operación La Corona se adelantaba junto con la Universidad de los Andes, eso es completamente falso, la ULA ni participa ni ha sido invitada a participar en esta aventura. El ministro trató de engañar al pueblo de Mérida para darle algo de credibilidad a su cuestionable proyecto. El gobernador de Mérida, también miente cuando señala que el objetivo de esta operación es salvar el último glaciar de Venezuela, trata de engañar al pueblo de Mérida apelando a su conexión sentimental y cultural con la sierra nevada, la ciudad de las nieves eternas, las 5 águilas blancas, pero, nada de eso existe en la actualidad; las 5 águilas huyeron   espantadas hace ya mucho tiempo, ya no hay nieves eternas, no hay ningún glaciar para salvar.

Todos los glaciares de Venezuela desaparecieron hace años, se encuentran entre las primeras victimas en Venezuela del calentamiento global, lo que queda en el pico Humboldt, no es un glaciar sino un pedazo de hielo en avanzado estado de descomposición del tamaño de la plaza Bolívar de Mérida, cualquier pedazo de hielo no es un glaciar. Cuando el gobernador llama glaciar al pedazo de hielo que todavía se encuentra en el pico Humboldt, dicen los expertos que lo que demuestra es ignorancia sobre lo que es un glaciar, deja al descubierto que no sabe de lo que está hablando y con ese cuento pretenden despilfarrar millones de recursos públicos en un llamativo secretismo. Con este cuento chimbo no solo están violando leyes vigentes cometiendo delitos tipificados en el ordenamiento jurídico vigente, también están amenazando la salud y la seguridad de la población de Mérida. El plástico se deteriora cuando queda expuesto a la intemperie, las condiciones de insolación, cambios bruscos de temperatura, las lluvias y los vientos en el pico Humboldt son particularmente severas. Los 8 mil metros cuadrados de plástico que pretenden desplegar en el Humboldt se van a convertir en una gigantesca fuente de partículas de plástico muy pequeñas llamadas micro partículas que se propagan por el aire, y las fuentes de agua, contaminan además los suelos donde se cultivan alimentos, son tan pequeñas que no se pueden ver, penetran el cuerpo humano, por la respiración, o cuando se toma agua contaminada o a través de alimentos cultivados en suelos contaminados; son tan pequeñas que pueden hasta penetrar a través de la piel, pueden atravesar las paredes de los pulmones, y el tracto digestivo, de esa manera penetran en la sangre y por ahí se propagan a otros órganos.

Está claramente establecido por investigaciones científicas que estas partículas de plástico afectan el sistema respiratorio, el sistema digestivo, el sistema inmunológico y el sistema reproductivo. Se han encontrado en la sangre, en la placenta, en la leche materna, en el corazón y hasta en el cerebro, son extremadamente peligrosas, su propagación intencional es un grave delito. El despliegue de 8 mil metros cuadrados de manto plástico al pie del pico Humboldt se convertirá en una gigantesca fuente de partículas de plástico, invisibles pero extremadamente peligrosas; en el pico Humboldt los vientos predominantes provienen del este, la ciudad de Mérida se encuentra directamente al oeste del Humboldt, el peligroso proyecto del gobernador va a dañar a la población  de Mérida con micro partículas de plástico durante años sin que los merideños se den cuenta y sin asumir ninguna responsabilidad por sus acciones, es un crimen colectivo. La población de Mérida debe tomar conciencia de sus implicaciones y de su derecho a opinar, a participar y a defenderse. No hay ninguna justificación para exponer innecesariamente a la población de Mérida a estas amenazas a su propia seguridad. Quienes promueven esta aberración, pretenden evadir toda responsabilidad.

Cuando se presenten los síntomas en la población, ya estos burócratas públicos no estarán en sus cargos, cada quien tendrá que arreglárselas como pueda. Urge la intervención de la Fiscalía y de los Tribunales de Justicia para asegurar que los promotores de esta descabellada aventura, asuman la responsabilidad jurídica por las consecuencias sobre la salud de la población de un proyecto que no tiene justificación alguna.

El Dr. Julio César Centeno pregunta por qué los promotores de esta locura no cumplen con la obligación constitucional de convocar a la población para que exprese su opinión, así como también la presentación de un estudio de impacto ambiental.

Lamentablemente el espacio no me permite explanar todos sus múltiples y demoledores argumentos con bases científicas y éticas. Además, de la urgencia de publicar este artículo antes de que entre en vigencia la siniestra Ley del silencio, no vaya a ser que nos califiquen de fascistas y nos encarcelen a ambos.

Mi llamado a todos los voceros de los distintos sectores que hacen vida en nuestro estado y a toda la población en general para que se impida continuar esta locura, la campaña electoral no puede desviarnos y permitir semejante crimen.