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jueves, 24 de julio de 2014

Siempre genio y figura

El periodista Emilio Méndez pasó, junto a El Pana, la jornada de su debut en Francia


EMILIO MÉNDEZ 

Sin duda el pasado 20 de julio de 2014 quedara en la historia de la tauromaquia, tanto de México, como de Francia, ya que después de muchos años de correr la legua, le llego el día al maestro Rodolfo Rodríguez "El Pana" para debutar en "La France" - como dice el torero – Fue en la localidad de Suroeste francés de San Vicente de Tyrosse en la que los empresarios, el matador Roberto Piles y su hijo Jean Francois Piles, apostaron por traer al Brujo de Apizaco a Francia, como una forma de admiración al torero y por el agradecimiento a México de quien se han enamorado tanto del país, de su gente y de su tauromaquia. Fue así como se logro la contratación de "El Pana", quien muchos como ya es costumbre dudarán si podía con el paquete, si tenía las facultades y si su estado físico y metal le permitiera enfrentarse a los ejemplares de la ganadería de Rehuelga.

Al final El Pana es un enigma, es lo que lo hace diferente y único, puede pasar todo con el, pero unos días antes al platicar con el maestro, se le veía en esa mirada profunda una gran ilusión por debutar en Francia, esa ilusión que ya no se ve en la mirada de muchos toreros o novilleros, esa mirada de hambre, pero también de nostalgia por todo lo que ha vivido y superado Rodolfo Rodríguez y que Dios a querido que a estas alturas de su extrovertida carrera tenga otra ilusión más. Fueron días de una gran expectación, de atender a los medios de comunicación a su estilo, con su humildad pero siempre con esa personalidad y sello propio al andar y al hablar. En una de las entrevistas El Pana comentó que el es un torero místico que el viene de la vena del misticismo partiendo de Belmonte, Gitanillo de Triana, Silverio Pérez, y de Fernando de los Reyes "El Callao" y que es precisamente ese misticismo y esa sensibilidad es la que hace que "El Pana" conecte de inmediato y que ahora con ese conocimiento y de la forma tan especial como aprecian el arte de la tauromaquia los franceses, estaba seguro que algo importante pudiera pasar.

El Pana estuvo unos días antes en Pamplona y en Mont de Marsan causando revuelo entre los aficionados, quienes lo conocían y quienes se preguntaban "quien será este hombre tan diferente" que a gente se vólca con el para saludarlo, pedirle un autógrafo y tomarse una foto. Los mismos matadores de toros, novilleros, periodistas y gente del toro se tomaron el tiempo para saludar al maestro azteca que pronto se vestiría de luces para conquistar a La Francia.

Llego el día, 20 de julio de 2014, un día nublado, con lluvia por momentos, con algunos antitaurinos al rededor de la plaza de toros, pero al final nada de eso impidió que El Brujo de Apizaco se vistiera de luces y con su sarape de Saltillo y puro en la otra mano emprendiera a pie el camino a la plaza de San Vicente de Tyrosse. La gente sorprendida al verlo por la calle como lo llegaran hacer los toreros antiguos, le deseaban suerte y buscaban el momento para saludar al diestro mexicano. Llego a la plaza y ya lo esperaban un sin numero de fotógrafos y aficionados. Con temple, educación y paciencia atendió a cada uno de ellos para después saludar personalmente a las cuadrillas y a sus alternantes Manuel Escribano y Paco Ureña.

El Pana se lió el sarape de Saltillo y como ya es costumbre con el puro en la mano hizo el paseíllo a su estilo y a su paso deteniéndose por un momento en el que todas las miradas estaban en el. Se escucho la primera ovación para el tlaxcalteca en la tarde, tan solo por hacer el paseíllo.

Salió el primero de la tarde con el hierro de Rehuelga, un toro serio cinqueño llamado "Aguililla" al que dejo El Pana que su cuadrilla lo corriera e incluso lo parara para que pudiera darle los primeros lances que no fueron los mas precisos pero de repente surgió la magia en un remate inspirado en el que se escucho de inmediato el ole. Tomo la muleta y el estoque de matar para tomar los trastos a su estilo llevándolos por la espalda para pedir permiso a la autoridad y brindar su actuación al respetable.  Inició su labor al hilo d las tablas con muletazos por alto y el primer trinchazo artístico que llego de inmediato a los tendidos. El Pana fue tomando confianza poco a poco para empezar a correr la mano ante un ejemplar noble pero con su exigencia, vinieron varias pinceladas, muletazos templados y profundos y el remate, pero al salir de la suerte ante un toro que se empezó a revolver, se le mostro la falta de facultades físicas al torero que con experiencia y oficio terminaba cada tanda, vino un desarme y por poco la tragedia que gracias al capote de un atento subalterno le hizo el quite al maestro. Tomo de nuevo la muleta para seguir deleitando a los presentes con otros dos muletazos e intentar el trincherazo con su sello que no fue tan profundo ya que su oponente fue a menos, el final de faena por muletazos en alto muy a la mexicana y lamentablemente la suerte suprema se le complico al maestro para después ser ovacionado.

Llego el cuarto de la tarde, otro toro cinqueño cárdeno, que parecía mucho de lo que hay en el campo tlaxcalteca pero con presencia y seriedad, un toro bravo, con calidad al que saludo El Pana con capotazos de tanteo y una revolera con solera y muy templada. Intento el pana hacer un quite, que quedo solo en una chicuelina y que con eso basto ya que fue cumbre. Tomo la muleta pata iniciar su labor con estatuarios y muletazos por alto y rematando con el de pecho. Ya con confianza y con la gente con el, empezó a correr la mano, muletazos largos, templados muy sabrosos en los que los oles eran también largos a la mexicana, lo mejor fueron los naturales templados con la muleta muy baja. Una faena de detalles abelmontados, con muletazos profundos y con remates con inspiración. Si claro, no todo fue puro y constante, pero cuando salía la magia del brujo por momentos, las sensaciones fueron únicas. El final de la faena fue por muletazos en alto y por Sanjuaneras, recordando al diestro mexicano Luis Procuna, y en la suerte suprema, El Pana aposto por matar recibiendo, lo cual lamentable no pudo ser, perdiendo así un posible trofeo que se fue desmoronando al ver como pasaban los minutos para que cayera su oponente. Al final palmas al buen Rehuelga y sacaron al tercio a El Pana que no se la pensó para dar el paso adelante y dar la vuelta al ruedo por el lado derecho a la mexicana. Lo cual sorprendió a los presentes y al principio la gente no sabía lo que pasaba y de menos a mas la gente se le fue entregando, por ahí le dieron una Baguette, y le empezaron a tirar puros y flores. Sin duda una vuelta al ruedo muy diferente y que el Pana emocionado con esa entrega con la bandera de México en el hombro volvió a dar una segunda vuelta, terminando en los medios besando la arena de este coso. Al final del festejo el Pana dejo que salieran sus alternantes para ser el último en salir con una gran ovación y como un gran detalle de la banda, tocaron en jarabe tapatío para dar fin a este festejo.

Habrá quienes salieron muy contentos de este debut, algunos extasiados por los detalles de El Pana, otros tal vez se divirtieron con el espectáculo y habrá quienes seguramente se les hizo patético, lo que si es un hecho es que hay un hombre Rodolfo Rodríguez creador del personaje de "El Pana" que a su longeva edad y mermado de facultades a causado la admiración, ha logrado una vez mas causar expectación y sensaciones únicas, y  sea quien sea, el simple hecho de decir "yo estuve ese día en el que El Pana hizo su debut en Francia, que dio dos vueltas al ruedo a la mexicana" que lo vieron con el puro, pero sobre todo pudieron disfrutar por momentos de ese toreo mágico del Brujo de Apizaco, esto es sólo, para algunos privilegiados que contaran a sus siguientes generaciones, algo que hoy ya no sucede en estos días con la baraja de toreos actuales.


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