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miércoles, 3 de diciembre de 2014

César Rincón, premio de Cultura de la Comunidad de Madrid

El torero colombiano César Rincón ha sido galardonado con uno de los premios de Cultura que anualmente concede la Comunidad de Madrid a las personas o entidades que se hayan destacado por su labor en el mundo de la cultura en sus más amplias facetas. La entrega de este premio ha tenido lugar en un acto celebrado en los Teatros del Canal al que asistió el consejero de Presidencia, Salvador Victoria, en calidad de presidente del Consejo del Centro de Asuntos Taurinos y el Gerente del Centro, Carlos Abella.

Este galardón, en el ámbito taurino, fue concedido por primera vez en 2011 al ganadero Victorino Martín y en 2012 a los toreros Joselito, José Luis Bote y El Fundi, como símbolo del trabajo de las escuelas de tauromaquia como germen de personas y de toreros.
 
El premio reconoce la aportación que César Rincón ha realizado con su toreo y sus éxitos a la historia del toreo en España, Francia y en Colombia, y especialmente en la plaza de toros de Las Ventas, por cuya Puerta Grande salió en cuatro ocasiones en la temporada de 1991, como así lo atestigua un azulejo que en su honor fue descubierto en la Monumental madrileña en 2011.

Biografía

César Rincón nació en Santa Fé de Bogotá el 5 de septiembre de 1965 en el seno de una familia muy humilde y desde muy joven sintió su afición por el mundo de los toros y su deseo de llegar a ser figura en esta difícil profesión. Con tan sólo 12 años vistió su primer traje de luces en la plaza de toros de Cali. Vino a España en 1981 y se enroló en el espectáculo cómico taurino “el Toronto y sus monos toreros”, recorriendo la geografía española dentro de la parte seria de dicho espectáculo y, un año más tarde, consiguió torear una veintena de novilladas. Regresó a su país para tomar la alternativa el 8 de diciembre de 1982 en la plaza de Santamaría de Bogotá con “Antoñete” de padrino y José María Manzanares de testigo. Volvió a España en 1984, pero toreó tan sólo cuatro corridas, incluida la de su confirmación en Las Ventas, el 2 de septiembre, con “Manili” de padrino y Pepe Luis Vargas de testigo, y muy pronto regresa a Colombia pues los resultados no habían sido los que él había deseado.
Tras siete años de ausencia, en 1991, el 21 de mayo, en plena Feria de San Isidro, César Rincón obtendría el primero de sus éxitos de más resonancia, tras cortar dos orejas a un astado de Baltasar Ibán y salir a hombros por la Puerta Grande de Las Ventas. Al día siguiente volvió a torear sustituyendo al diestro Fernando Lozano, que había resultado herido, y de nuevo salió a hombros de la Monumental madrileña, hazaña que repetiría dos veces más en la misma temporada: la tercera en la tradicional corrida de la Beneficencia, mano a mano con José Ortega Cano, y la cuarta en la feria de otoño, estableciendo así un hito no superado. A las cuatro salidas a hombros ya relatadas se suman dos más obtenidas en 1995 y 2005, hasta su retirada de los ruedos en 2007, en una clamorosa tarde en la Monumental de Barcelona, alternando con José Tomás y Serafín Marín.
César Rincón hizo el paseíllo en la plaza de toros de Las Ventas en 30 ocasiones, estoqueando 59 toros, a los que cortó 15 orejas. Además, el torero colombiano ha participado en cinco corridas de la Beneficencia, en los años 1991, 1992, 1995, 1999 y 2006.

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