Solidez y actitud de Colombo, buen debut en Las Ventas

El palco niega al venezolano un trofeo pedido de forma mayoritaria y Aguado deja caros detalles y saluda una ovación

 

Fotos: JAVIER ARROYO
 
Íñigo Crespo
 
Manejable el primero de El Montecillo, muy noble y bondadoso. Faena pulcra y templada de Jesús Enrique Colombo, que banderilleó con brillo y ligó una faena de muy buen concepto, corriendo la mano con prestancia. Valiente cuando el animal se paró. Pinchazo y estocada saliendo trastabillado, entrando en ambos casos con todo. Ovación con saludos.



Extraordinario el tercio de banderillas que cuajó Colombo al cuarto, tercio brillante, poderoso y espectacular, encontrando novillo en todos los terrenos y haciendo la suerte con entrega y pureza. Bueno y con movilidad el novillo. El venezolano hilvanó ante él una faena ligada y capaz, de soltura y facilidad, en la que estuvieron más y mejor cosidas las tandas sobre la mano derecha. Firme el novillero en el tramo final, con el utrero más apagado. Estocada de la que fue derribado de un seco pitonazo en la rodilla, saliendo dolorido del trance. De forma inconcebible el presidente no concedió la oreja, pedida de forma mayoritaria por el público. Vuelta al ruedo tras fuerte y mayoritaria petición.

Bueno el segundo novillo, que tuvo calidad y movilidad aunque se apagó pronto. Pablo Aguado firmó una faena con un excelente concepto y salpicada de muletazos de buena factura y clásico acento aunque no acabó nunca de tomar vuelo. Silencio tras marrar con el acero.

Compuso bien Pablo Aguado frente al exigente y encastado quinto, novillo con cambiante embestida al que toreó con reposo y actitud en redondo. Labor a la que le faltó continuidad y en la que sobresalieron muletazos sueltos excelentes y un buen volapié final. Ovación con saludos.

Noble aunque bajo de raza el tercero, con el que estuvo templado y a gusto Rafael Serna, que cuajó una faena de buen tono. No tuvo intensidad por la condición del animal, pero demostró su facilidad. Silencio.

Complicado y deslucido el sexto, que midió con mal estilo. Sin opciones Rafael Serna, que no se pudo confiar por las complicaciones y agrio comportamiento del utrero. Estocada casi entera y tres golpes de descabello. Silencio.

Madrid, lunes 22 de mayo de 2017. Novillos de El Montecillo. Bien presentados, bien hechos, variados de capa, de juego desigual. Nobles los tres primeros aunque a menos. Bueno el 4º. De buena condición el 5º, que fue exigente. Complicado y con peligro el 6º. Jesús Enrique Colombo, que se presentaba en Las Ventas, ovación con saludos y vuelta al ruedo tras fuerte y mayoritaria petición de oreja; Pablo Aguado, silencio y ovación con saludos; y Rafael Serna, silencio en su lote. Entrada: Dos tercios.