Continúa la suspensión de festejos taurinos ante la incertidumbre de la pandemia

Enrique Ponce anuncia su intención de vestirse de luces a primeros de agosto en la provincia de Jaén

Enrique Ponce, en la plaza de Zaragoza, durante la feria de 2018.Javier Cebollada / EFE

El País

La incertidumbre ante la evolución de la pandemia de la covid-19 y la inconcreción de las medidas que se aplicarán a los espectáculos públicos tras la fase 3 de la desescalada son los motivos que llevan a las empresas taurinas a suspender corridas y ferias que deberían celebrarse incluso en los meses de agosto y septiembre.

Mientras tanto, el diestro Enrique Ponce ha adelantado al portal Aplausos su intención de vestirse de luces a principios de agosto en la localidad jiennense de Navas de San Juan, para lidiar cuatro toros de su propia ganadería en un festejo que podría ser televisado y que abriría un rejoneador.

Este gesto no deja de ser un caso aislado, pues a los cerca de 300 festejos de todo tipo que ya han sido anulados en ruedos España y Francia desde que se decretó el estado de alarma -incluidos los de Fallas, Feria de Abril, San Isidro y San Fermín-, se suman ahora, y a través de anuncios expresos, otro centenar largo de entre que los que habrían de celebrarse del 15 de julio en adelante.

Se desconoce aún la determinación que tomarán las empresas de las ferias de Santander, Huelva, Gijón, Pontevedra o Málaga y Almería

Así, ya es público que en agosto no se verificarán ciclos de la trascendencia de la Semana Grande de San Sebastián y las llamadas Corridas Generales de Bilbao, las dos citas taurinas más importantes de la temporada en el País Vasco, que, entre ambas, llegan a la docena de festejos. Ambos ciclos norteños, fijados tradicionalmente en la segunda quincena de dicho mes, coinciden en fechas con otro gran número de corridas y novilladas durante la época en que la campaña taurina alcanza su máxima intensidad.

En esa época del año tendrían que celebrarse los abonos de Cuenca y Ciudad Real (cuya plaza está en obras) o las madrileñas de Colmenar Viejo y San Sebastián de los Reyes, que también han sido ya anuladas, al igual que los ciclos de Dax y Béziers, en tierras galas.

Antes, en la segunda quincena de julio, no se darán los festejos de la feria de Julio de Valencia, Azpeitia (Guipúzcoa), Tudela (Navarra) o Roquetas de Mar (Almería), además de las corridas y novilladas de las francesas de Mont-de-Marsan, Bayona, Mejanes o Beucaire, entre otras.

Más adelante, en la primera quincena de septiembre, cuando el número de corridas y novilladas alcanza en Europa su pico más alto, tampoco tendrán lugar, como ya han hecho público ayuntamientos y empresas, citas tan significativas como las de Murcia y Albacete o la corrida del Motín en Aranjuez (Madrid).

Se desconoce aún la determinación que tomarán las empresas de las ferias de Santander, para finales de julio, de Huelva, Gijón, Pontevedra o Málaga y Almería, en el mes de agosto, y de las septembrinas de Valladolid, Salamanca, Guadalajara, Palencia, Ronda o Nimes, plaza francesa esta donde estaba prevista la presencia del diestro José Tomás.

Hasta el momento, solo han hecho pública su decisión de organizar festejos, sean cuales sean las condiciones sanitarias impuestas, las empresas de la plaza abulense de Arévalo -que ofrecerá dos corridas de toros y un espectáculo de recortes entre el 17 y el 19 de julio-, Astorga (León) -una corrida a mediados de agosto- e Illescas (Toledo), a primeros de septiembre.

En cuanto a plazas francesas, la organización de la feria de Istres, que habría de haberse celebrado en junio, ha trasladado un abono más reducido a octubre, mes en el que también se anuncia, el día 25, un festival benéfico en la localidad de Samadet.

Por otra parte, durante las próximas semanas se celebrarán en distintas plazas las novilladas sin picadores del Certamen de Escuelas de Andalucía, patrocinadas por el gobierno autonómico y retransmitidas por Canal Sur TV, aunque sin presencia de público en los tendidos.