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| Manolo Muñoz durante la conversación en la monumental valenciana. |
Jesús Ramírez “El Tato”
Manolo Muñoz escaso de palabras pero lleno de optimismo, se aferra a premisas fundamentales ante el compromiso de vestirse de luces nuevamente en la monumental donde se hizo matador de toros. Primero la reivindicación de un compromiso ético con su toreo de valor y entrega y segundo la auto exigencia máxima para salir airoso del fuerte compromiso.
Manolo Muñoz, más delgado con corte de cabello a la moda, entrena en el coso del Palotal casi durante todo el día y con la mente puesta en el 26 de abril, junto a dos toreros con proyección que han sentado en plazas de los Andes sus más sonados éxitos.
El joven espada valenciano quiere seguir evolucionando y la mejor forma de hacerlo es toreando, cortando las orejas que en esta oportunidad no se me van a ir, dijo al recordar su ultima tarde en el coso palotaleño.
Es realmente un compromiso fuerte ese del regreso de Muñoz a la plaza de su alternativa el 20 de noviembre de 2011. Sus admiradores, que los tiene a montón confían en él, en sus posibilidades y condiciones y el joven espada que escasamente habla, si refiere que la plaza no le pesa y que al contrario le brinda mucha confianza y optimismo para triunfar.
Recordamos que Manolo Muñoz alternará el 26 de abril en la reapertura de la monumental luego de mas de un año de inactividad, al lado de dos toreros andinos con sello de triunfadores como Rafael Orellana nativo de Tovar y reciente triunfador en la Feria del Sol y Fabio Castañeda que debuta en el coso monumental de Valencia con toros de las ganaderías venezolanas de Campolargo, “Tierra Blanca” y “Santa Fe”. Una importante cita para la afición valenciana con más de un año ayuna del espectáculo taurino y también para la torería venezolana que puede izar bandera triunfal en un momento exigente de la convulsionada fiesta brava local.
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