El extremeño protagonizó los mejores pasajes del festejo ante el desigual encierro de Santa Rosa de Lima
Jaime de Rivero
Fotos: MATÍAS
José Garrido recibió a portagayola al primero, con el que confirmó su alternativa en Acho. Tras las verónicas de recibo, el toro recargó en el caballo y se mostró noble en la muleta. El extremeño anduvo firme en las primera series diestras, por donde el toro tendía a quedarse corto. Por naturales bajó de intensidad la faena. Concluyó el trasteo con manoletinas y una gran estocada. Fue aplaudido.
Garrido perdió la oreja del sexto por tratar de matar recibiendo en los medios y marrar en dos entradas. Fue éste el mejor toro de la corrida. Lo toreó bien el extremeño, sobre todo en las dos primeras tandas de derechazos. Por el lado zurdo no se dejó igual el astado, por lo que Garrido regresó al lado derecho, por donde surgieron los mejores muletazos. Remató con pases por la espalda. Dos pinchazos y una estocada baja le dejaron sin premio.
Escribano recibió al segundo con dos largas de rodillas en el tercio. Tras un quite por chicuelinas, en el tercio de banderillas llegó lo mejor de la actuación del sevillano. El toro se arrancó de lejos y los pares los clavó por derecho. El más ovacionado fue el último, al quiebro y al violín. Con la muleta lo recibió en los medios con cambiados por la espalda, pero el toro, soso y un punto complicado, se fue apagando. Poco lucimiento pudo haber. Mató de estocada tendida y fue silenciado.
El cuarto fue el mejor ejemplar de Santa Rosa de Lima hasta el momento de su lidia, al menos el único que humilló. A portagayola se fue a recibirlo Escribano. Luego, el animal recargó en el caballo y ejecutó después el torero un quite por caleserinas. Sin embargo, lo mejor de nuevo fueron sus pares de banderillas, fuertemente ovacionados. Con la muleta las primeras series diestras fueron buenas, por abajo, tirando luego de toreo accesorio ya que por el lado izquierdo el toro no mostró tanta calidad. Labor de más a menos, coronada de pinchazo y estocada trasera. Aplausos para el toro y ovación desde el tercio para el sevillano.
El tercero se colaba peligrosamente por el pitón derecho prácticamente desde su salida. Por el izquierdo resultó algo más franco, aunque embistiendo a media altura y obligando a su matador, Paco Ureña, a que diese los pases de uno en uno. Lo mejor de la actuación del murciano, las verónicas hasta los medios con las que recibió a su antagonista. Poco más pudo hacer. Mató de estocada baja.
Poco pudo hacer Ureña frente al quinto, un toro especialmente deslucido. Sin clase, el animal topaba y no decía nada en su embestida. Apenas algunos naturales aislados lograron concitar cierta atención.
Las verónicas iniciales también fueron buenas. Pero nada más. Pitos al toro y silencio para el torero.
Lima (Perú), domingo 19 de noviembre de 2017. Feria del Señor de los Milagros. Plaza de Acho. Toros de Santa Rosa de Lima. Desiguales de juego. Los mejores, el 4º y -especialmente- el 6º.Manuel Escribano, silencio y ovación con saludos; Paco Ureña, silencio y silencio; y José Garrido, aplausos en su lote. Entrada: Media plaza. Garrido confirmó con Talentoso, nº 230, negro listón, de 486 kilos de peso
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