Mundotoro
Tiene el toreo en sus hoteles taurinos un criadero de afición en las principales ferias y en las grandes ciudades. Allí, donde el contacto con el toreo deja ser menos natural. En la urbe, es donde los hoteles taurinos se hacen casi esenciales, para mantener el ambiente taurino más allá de las paredes del coso. Donde los niños pueden ver a sus ídolos, convivir con ellos. Y no hay nada más puro que eso. Ni mejor nexo de unión con el toreo.
Hay ciudades en las que el toreo ha perdido ese ambiente durante la feria. No así Sevilla, que guarda en el Hotel Colón un ambiente taurino desde primera hora de la mañana. El idóneo para ser un criadero de afición, en una entrada y salida constante de toreros, banderilleros y profesionales, más cercanos que nunca a la gente y a los más pequeños. Ese lugar donde se habla y se respira tauromaquia las 24 horas del día. Donde se puede hablar y escuchar de toros, algo perdido y cuna de aprendizaje para lo más pequeños. Los hoteles taurinos siempre deben contar con el toreo y sus gentes, porque mantienen la llama viva del toreo. Y en Sevilla, ese siempre será el Hotel Colón.
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