APLAUSOS
Un
año más, acompañado de un grupo de amigos y profesionales del toro, se
ha dirigido hasta El Rocío para dar gracias a la Virgen.
Un año más Juan José Padilla se ha sumado a la
peregrinación a la aldea de El Rocío por el Coto de Doñana, como ya
viene siendo tradición al finalizar cada temporada, acompañado por un
grupo de amigos, toreros y profesionales del toro, en su mayoría de
Sanlúcar de Barrameda. La ruta arranca en Bajo de Guía -Sanlúcar de Barrameda- y termina en la aldea de El Rocío, donde se oficia una misa ante la Virgen de la localidad en la ermita de La Blanca Paloma. En total, más de cuarenta kilómetros recorridos en su mayoría a pie por las arenas del Coto de Doñana.
"Es un placer poder en cada paso ir dándole gracias a la Virgen y al mismo tiempo ofreciéndole toda mi felicidad por muchas circunstancias y muy positivas personal y profesionalmente", explicaba en el camino el diestro, quien estaba "deseando llegar Almonte, ya que como sabéis cada siete años es trasladada hasta pentecostés, para mirar su cara acordándome y poder dar gracias de todos cuantos habéis estado ahí... apoyando, animando y con tanto respeto y cariño. Va a suponer seguramente una emotividad muy profunda", explicaba el torero, fiel devoto de la Virgen a la que pedirá "que nos de fuerzas y salud para seguir ofreciéndole lo mejor de nosotros y nos eche su manto para hacernos el quite en el momento preciso".
No hay comentarios:
Publicar un comentario