La mitad de los decesos en Europa, pero EEUU desborda de casos
Imagen símbolo del mundo de hoy. Ataúdes en Bérgamo, Italia. (foto: ANSA)
(ANSA) - ROMA, 2 ABR -
Casi un millón de infecciones en el mundo, más de 50 mil muertes, más de la mitad de ellas en Europa, y el 50 por ciento de la población mundial confinada a su hogar, ese es el mundo actual atacado ferozmente por la pandemia Hay casi 4 mil millones de personas en 90 países en aislamiento obligatorio o recomendado, toque de queda o cuarentena. En un día que entregó cifras alarmantes que van más allá de las predicciones más oscuras, el aumento en términos absolutos de pacientes y víctimas se entrelazó con leves signos de una desaceleración porcentual en el crecimiento de los casos que, muy lentamente, lo que lleva a los políticos a esperanzarse en el pico tan esperado, o más bien la meseta que en unas pocas semanas debería marcar el comienzo al descenso. Pero, por ahora, la emergencia sigue siendo dramática.
España se derrumba, aunque tiene en Italia la triste primacía de las infecciones, más de 110 mil, está en segundo lugar en Europa por unos pocos miles de casos de diferencia. Por sexto día consecutivo, más de 800 murieron en 24 horas con el récord de 950 muertes en España, muy cerca de las 969 del viernes y con un total de más de 10 mil víctimas. "Hemos alcanzado el pico de la curva y estamos comenzando la fase de desaceleración", dijo el ministro de Salud español, Salvador Illa, en el Parlamento, después de la comunicación de los nuevos números dramáticos sobre la emergencia del coronavirus que empujó a Cataluña, una de las áreas más afectadas con más de 2.000 muertos- a pedir ayuda a Madrid. Fue el líder independentista Quim Torra quien lanzó un sincero llamamiento a través de Radio Ser Catalunya: "Si pueden ayudarnos, si algún médico puede ayudarnos y venir aquí, estaríamos agradecidos", musitó.
Y también se registró un nuevo récord en Gran Bretaña con 569 muertes más por Covid-19 (en total hay 2.921) y más de 33.700 infecciones. Londres está tratando de aumentar el número diario de pruebas, más de 10 mil, con el anuncio de un plan de cinco puntos que elevará los hisopados a 100 mil por día.
Eso representa una respuesta a las críticas contra el ministro de Salud, Matt Hancock, liberado del aislamiento una semana después de la infección, mientras el primer ministro Boris Johnson permanece en cuarentena.
Más de 470 murieron en un día en Francia, que contó más de 4.500 muertes y hoy notificó a Bruselas el cierre temporal de las fronteras, lo que se suma a los 14 miembros del área Schengen que han restablecido bloqueos en sus límites internos.
Las terapias intensivas en Francia, con más de 6.000 hospitalizados, ya no pueden cubrir las necesidades e incluso el Accueil Notre-Dame del santuario de Lourdes, después del cierre vinculado a la emergencia de salud, "ha reabierto su puertas para alojar a unas veinte personas afectadas por el mal".
Sin embargo, relativamente bajo control, está la situación en Alemania, que tiene un número menor de víctimas, menos de mil, y recibió elogios de la OCDE, que destacó el "gasto per cápita en salud más alto que todos los demás países europeos".
En consecuencia, Alemania tiene un sistema suficientemente equipado para responder a la pandemia, aún cuando los datos sobre el contagio entre médicos y enfermeras son preocupantes: 2.300. El panorama dramático no escapa incluso a Vladimir Putin, que está en semi-aislamiento después de la reunión, la semana pasada, con el jefe del hospital Kommunarka, que luego dio positivo en Covid-19.
La tragedia es aún peor del otro lado del Atlántico. Estados Unidos es el primero en el mundo con más de 225 mil casos y la alarma es tal que la protección civil estadounidense, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, ha pedido al Pentágono 100 mil bolsas de cadáveres para su uso civil en vista del posible aumento de decesos.
De momento, los fallecidos en Estados Unidos alcanzan más de 5.100. La administración Trump ha decidido que ya no enviará equipo de protección debido a la grave escasez interna a sus aliados y socios en el extranjero y la falta de máscaras y respiradores es tal que Estados Unidos también aceptó la ayuda médica de Rusia. (ANSA).
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