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Una nueva polémica ha surgido tras la inauguración de un puente vehicular en el Cañón del Micay, departamento del Cauca, por parte de las disidencias de las FARC comandadas por alias ‘Iván Mordisco’.
La situación ha generado indignación y preocupación en todo el país, especialmente después de que se difundieran imágenes en redes sociales que muestran al grupo ilegal cobrando peajes a los conductores que transitan por la zona.
En las imágenes difundidas, se puede ver a los guerrilleros en plena ceremonia de inauguración, lo que ha dejado a muchos colombianos sorprendidos y alarmados por la demostración de poder y control territorial del grupo armado.
Lo que ha causado mayor indignación es el hecho de que las disidencias de las FARC han establecido peajes ilegales en el puente, cobrando a los conductores que desean cruzar. Este acto no solo representa una afrenta a la autoridad del Estado, sino que también pone en evidencia la falta de presencia y control gubernamental en la región.
El puente fue construido en cinco meses, tiene capacidad para resistir hasta 40 toneladas y $costó 650 millones de pesos.
La inauguración ocurrió en la tarde del pasado lunes 1 de julio. La comunidad realizó un bingo para celebrar y hasta el sitio llegaron los hombres ilegales para romper el listón que dio apertura al puente que, dicen, beneficiará a 12 veredas.
Este puente vehicular es capaz de soportar un peso de hasta 40 toneladas, según información de Fuerzas Militares, pero guarda un detalle que acapara la atención: para transitar por él es necesario pagar un “peaje comunitario”, y su precio varía dependiendo de si se va en moto o en carro.
Para el caso de los carros, el peaje tiene un valor de $10.000 pesos colombianos, mientras que en el de las motos, la tarifa es mucho menor, de $2.000. Los precios se anuncian en un cartel junto a la carretera, a escasos metros de la obra, con la firma de la “Junta Pro Carreteras”.
La comunidad alegó que la obra fue construida con recursos propios y que los disidentes aportaron el 15%.
“Este puente fue construido entre cinco y seis meses de construcción. Los recursos económicos fueron de $600 millones de pesos y el puente tiene capacidad de carga de entre 35 y 40 toneladas. Conseguimos los recursos gracias a las actividades de las comunidades como bingos y eventos, fue mucha la acogida de las juntas de acción comunal del Cañón del Micay”, dijo Eduard Rubiano Álvarez, secretario de la Asociación Campesina del Micay.
El líder campesino aseguró que el frente Carlos Patiño de las disidencias también aportó recursos para la construcción del puente. El Cañón del Micay ha sido escenario de disputa por el control de los cultivos ilícitos, entre las disidencias de las Farc del Estado Mayor Central, la Segunda Marquetalia, y el ELN.2:08
Las imágenes difundidas también dan cuenta de la entrega de maquinaria amarilla que se destinará en el mantenimiento de las vías y del puente.
El frente Carlos Patiño está al margen de las negociaciones de paz con el Gobierno. Esta no es la primera vez que las disidencias entregan obras que, en teoría, son responsabilidad del Estado.
En mayo pasado, en límites entre el Meta y Caquetá, las disidencias hicieron entrega del colegio agropecuario “Gentil Duarte”.
El espacio está dotado con un parque infantil, cancha de micro, salones y hasta dormitorios para los niños que viven en las veredas más apartadas de esa zona de los llanos del Yarí. El Gobierno Nacional intentó legalizar el predio, pero los gobernadores del Meta y del Caquetá se oponen.
El 31 de mayo se conoció la inauguración de un centro de salud en zona rural de Tibú, Norte de Santander. Fue entregado por los disidentes del EMC del Frente 33.
2 comentarios:
Poco a poco Petro le entregará Colombia s los delincuentes organizados en guerrilla.
Se l dejaron meter con petro
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