El estado elegirá un puesto clave en la Corte Suprema, el cual podría obstaculizar leyes electorales de cara a las votaciones de mitad de período de 2026 y la carrera presidencial de 2028. Esta campaña judicial está catalogada como la "más cara de la historia de Estados Unidos"

El estado péndulo de Wisconsin vuelve a la palestra en Estados Unidos. Esta vez no se trata de su importancia en relación con las elecciones presidenciales, sino porque el próximo 1 de abril el estado elegirá a su nuevo juez en la Corte Suprema en sustitución de la magistrada Ann Walsh Bradley, quien se jubila luego de 30 años en ejercicio.
Más allá de este reemplazo, la campaña electoral se convierte en una batalla campal que ambos espacios políticos –demócratas y republicanos– quieren aprovecha. De ahí que en total se hayan gastado 81 millones de dólares siendo catalogada como la contienda judicial “más cara de la historia de Estados Unidos”, según datos recopilados por el Centro Brennan. Las implicaciones que puede tener el resultado es lo que le quita el sueño tanto a quienes hoy ocupan la Casa Blanca, como a quienes aspiran a plantar algo de oposición a la Administración Trump en el estado clave.
No hay comentarios:
Publicar un comentario