El nuevo Juli de siempre

Desoreja a un gran quinto y pierde un premio seguro también en el segundo; a Padilla y Perera se les vinieron abajo sus oponentes

EMILIO TRIGO, Zaragoza


Una cartel de auténtico lujo el que presentaba Zaragoza esta misma tarde: la vuelta de Padilla tras la corrida de Fuente Ymbro que no le ayudó a triunfar, el regreso de Miguel Ángel Perera como el doblete justo de la Feria del Pilar y la llegada rompedora de Julián López "El Juli" para culminar una temporada de ensueño. Era ante un encierro de Parladé y Victoriano del Río.

El primer toro fue un ejemplar de Toros de Cortés con 628 kilos de peso que, además manseó de salida. Se prestó huidizo a la lidia en todo momento, y cuando hacía ademán de entrar al caballo, volaba huyendo de ese lugar en cuanto sentía el hierro. Sembró el desorden en la lidia y finalmente fue condenado por el presidente a banderillas negras, sacando éste el pañuelo rojo. Le plantó cara Padilla, tragándose el toro algunos, echando la cara abajo y entregándose a la disposición del jerezano. Fue manso pero con un comportamiento distinto en los primeros tercios. Una estocada cayó sobre sus lomos, mostrando Padilla raza ante la adversidad de un toro manso.

Lanceó con muchísimo gusto El Juli a un buen toro de Parladé, que tuvo duración, ritmo, nobleza y fijeza. En el caballo entró con ímpetu, aguantando un quite largo de El Juli y posteriormente otro por tafalleras de Perera. A partir de ese momento lo brindó al público y Julián desplegó toda su tauromaquia de inteligencia, capacidad y ritmo. Por ambos pitones sirvió el toro, y luego acortó distancias entre los pitones mandando en su embestida. Fue un gran toro. Dos pinchazos y el aviso dejaron todo en una ovación.
El tercero de Victoriano del Río fue un toro que salió dormido, también dando muestra de su mansedumbre. Complicado oro en la lidia. Empujó y buscó por debajo de los capotes, protagonizando momentos de nerviosismo. Se dolió mucho en el caballo, dando arreones. Miguel Ángel, que lo brinda al Tendido Joven de Zaragoza, sufriendo una colada de inicio de la que ni se inmutó. En las afueras, le planteó una faena fiel a su estilo. Fue un zorrón que tenía más peligro dentro del que daba a entender en la muleta. Miguel Ángel falló con el descabello.

El cuarto entró en el caballo y se quedó dormido en el peto, sin pegarle más de seis minutos. No había forma de sacarlo, teniéndolo que sacar en el centro del ruedo. No hubo acople en el salud con un toro que venía con la cara colocada. Se negó a embestir en el último tercio, en el que Padilla quedó inédito, intentándolo sin conseguir nada.
 
Dos orejas cortó El Juli a un gran toro de Victoriano del Río al que recibió muy a gusto con el capote, cumpliendo con creces en el caballo. Quitó posteriormente por lopecinas tras haber entrado dos veces en el caballo, sin moverse, hierático y mandando en la embestida del toro.   En faena comenzó citando al toro en el burladero, con él en los medios, y ofreciéndola al bueno de Victoriano. Una vez que la tomó pronto y alegre, julio le cogió ritmo a la encastad y enclasada embestida del animal. Surgieron en ese momento las series encajadas y estéticas, con un Julián de compás abierto, muleta adelantada y acariciando el albero. Los naturales fueron de mano muy baja y trazo muy largo. Extraordinarios fueron los remates finales con la pierna genuflexa, antes de dejar un espadazo atracándose de toro.

El cierraplaza fue un toro deslucido al que Perera recibió con las dos rodillas en tierra, jugando a la verónica. Ya se observó entonces que el toro iba a tener un poco fuelle, lo que fue demostrando el toro poco a poco a medida que avanzaba la lidia. Se fue apagando y diluyéndose paulatinamente. Miguel Ángel brindó al público pero sólo le aguantó el toro dos tandas iniciales en la que apunto cosas pero después se desfondó y ahí acabó todo.

FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de La Misericordia. Corrida del Día de la Virgen del Pilar.
Toros de Victoriano del Río, Garcigrande y Domingo Hernández, bien presentados y desiguales de juego. Destacaron segundo y quinto.

Juan José Padilla, ovación con saludos y silencio.
Julián López "El Juli", ovación con saludos tras aviso y dos orejas.
Miguel Ángel Perera, silencio tras aviso y ovación.