HISTORIAS CURIOSAS DEL TOREO
EFE
Aprovechando la final de la Champions League que hoy se celebra en Kiev, recordamos una curiosa historia con toques futbolísticos. Nos remontamos a la época de novillero de Antonio Barrera. El sevillano estaba anunciado en el pueblo de Las Mesas, en la provincia de Cuenca.
Allí, la plaza de toros se encontraba en un recinto justo al lado del campo de fútbol de la localidad. Después de ser picado el novillo y aprovechando que se abrieron las puertas para que se fueran los picadores, el animal se escapó de la plaza y salió corriendo hasta el terreno de juego.
Entonces, Barrera y dos banderilleros salieron corriendo tras él y el público subió hasta la última fila del tendido para ver lo que estaba pasando al otro lado. Barrera decidió iniciar allí mismo su faena.
- «Fue gracioso. En mi vida pensé que haría una faena en un campo de fútbol. Verme ahí, pegando pases en el área pequeña, al lado de la portería, con un banderillero escondido detrás de cada poste... Fue cómico. Y la gente se volvió loca».
El novillo llegó a voltear a Barrera, pero la acción «no fue merecedora de tarjeta roja» y el sevillano pudo seguir toreando tras el susto.
Al final de la faena, Barrera tiró del novillo hasta conseguir meterlo en la plaza y finalizar allí su obra con unas manoletinas. Una estocada terminó con la concesión de las dos orejas, el rabo y una pata y la gente enloquecida y rendida al arte del torero 'futbolista'.
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