jueves, 3 de octubre de 2013

Santiago Fausto piensa en el doctorado

SANTIAGO Fausto. (FOTO: ARTURO GARCÍA)


POR MIGUEL ÁNGEL GARCÍA
APESAR de que la empresa de Madrid le dejó las puertas abiertas al novillero Santiago Fausto para regresar el próximo año, luego de la importante tarde que tuvo en Las Ventas, el queretano ya está pensando más en la alternativa. Santiago está en México desde hace un par de semanas, llegó con la idea de volver a Las Ventas a triunfar como novillero, sin embargo, el tiempo no perdona y piensa que lo mejor es recibir el abrazo lo antes posible. Pero, ¿qué plaza le vendría mejor al torero para tomar el doctorado? Yo creo que la Santa Maria, de Querétaro, en los próximos festejos del 50 Aniversario. Ahora que anduve en Juriquilla me enteré que los jóvenes empresarios Manuel Herrerías y Pablo Álvarez ya preparan un magno evento para esta trascendente celebración, que será en diciembre. A detalle no supe si darán más de una corrida, lo que sí es que el festejo que enmarque dicha fecha será todo un acontecimiento, y ahí, bien podría caber la alternativa de este queretano. Siempre es muy recomendable una confirmación o una alternativa en una corrida de toros con figuras del toreo, ya que así abre el alumno y no los maestros. Santiago, además goza de buen ambiente en su tierra y llevaría por supuesto un número nutrido de seguidores ese día al coso, y no podría rematar de mejor manera su campaña novilleril que en la tierra que le vio nacer, aunado a que es un torero que se ha ganado el reconocimiento del público. Claro, todo esto es pura suposición, no estamos imponiendo carteles y mucho menos aconsejando a nadie; siempre hemos dicho que en estos temas la última palabra es del empresario. No obstante, se antoja mucho un cartel con Morante dando la alternativa a Santiago, con un testigo como Diego Silveti. O quite usted a Morante y ponga a Julián López. O bien, Joselito Adame por Silveti. Lo que sí deberá ser un hecho es que la empresa deberá compensar lo que nuestro querido Ponce pasó a amolar aquella vez, y además de un buen cartel se requerirá de una corrida de toros muy bien presentada.

Y no será extraño que José Manuel y Pablo echen la casa por la ventana en la Santa María para levantar a tope este coso y dignificarlo, como ya lo han hecho en Moroleón. No quede duda que así será, mientras (ya ve que casi no se acostumbra), vaya haciendo sus vaticinios de carteles, querido lector.

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