martes, 24 de diciembre de 2013

A la Feria Taurina de Cali llegan ocho españoles en un gran momento

El cronista español Manolo Molés analiza a los extranjeros que vienen a Cañaveralejo.

Manolo Molés | Especial para El País
Lo primero que me gustaría dejar claro —y a mí la claridad de un periodista me parece una obligación— es que este año la empresa de Cali ha contratado a ocho toreros españoles de características muy diferentes, que ocupan papeles muy distintos en la tauromaquia, pero que cada cual en su puesto es muy bueno y está en un gran momento.

Creo que han elegido muy bien, que no hay ‘recomendados’ en la lista de los españoles y que son ocho toreros los que han destacado claramente en la temporada europea.
Es más, todos ellos han subido un escalón o dos, todos ellos van a estar en las próximas ferias de la próxima temporada española. Posiblemente en carteles diferenciados, algunos, y otros compitiendo en todo lo alto.
Vamos a analizarles, pero, y los nombro por orden de actuación en la feria de Cali, los ocho han sumado muchas tardes de gloria en la campaña europea.
Javier Castaño Pamplona Foto: Germán D' Jesús Cerrada

JAVIER CASTAÑO Y EL ESPECTÁCULO TORISTA

Javier es un gran profesional. Salmantino, curtido en la dureza y con un retorno, después de varios años en el paro, espectacular. Por supuesto con corridas muy duras: Miuras, Victorinos, Cuadris, Cebadas, Doloresaguirre, etc. Pero con un enorme sentido de la lidia, con una gran cuadrilla, y ojalá que estén en Cali Tito, su magnífico picador, y cualquiera de sus excelentes banderilleros.
Enorme cuadrilla de un torero cuajado que solamente tiene que arreglar un grave problema: su espada funcionó mal en media temporada española.

ALBERTO AGUILAR, EL PEQUEÑO GIGANTE

Es menudo, pero es grande. Tiene valor, buen sentido del toreo, puede con el toro difícil y transmite a los tendidos lo que hace frente al astado. Ha hecho un gran año en Madrid, que le ha valido para cuajar una campaña con un número importante de festejos. Una tarde en Bilbao demostró que es un torero que se gana los puestos por derecho propio.

ANTONIO FERRERA: EL PRONÓSTICO DE CHENEL 

Aquí en Cali le puedes recordar cuando vino de novillero. Era bullidor animoso y muy rápido. Pero este extremeño se ha ido asentando y ahora es la madurez magistral. Físicamente pletórico y muy mejorado artísticamente. El maestro Antonio Chenel Antoñete siempre nos avisó de que ahí había un gran torero. Y ahora en Cali, si hay suerte, verán que el maestro madrileño acertó con el pronóstico.
Iván Fandiño en La Chinita Foto:Germán D' Jesús Cerrada

FANDIÑO O LA VERDAD DEL TOREO

Iván es así, un tipo sin dobleces. Un torero clásico y con la verdad por bandera. En todos los tercios arriesga con el capote y torea muy bien, pero pisando minas, con la muleta. Ya le conocen. Colombia lo quiere. Si la espada funciona como en España, ojo con Fandiño.

El Fandi Foto: Germán D' Jesús Cerrada

 

EL FANDI: EL GRAN ESPACTÁCULO DEL SEGUNDO TERCIO

David es una fuerza de la naturaleza. Muy bueno con la capa, el más espectacular con las banderillas, muy certero con los aceros y, si quieren, tiene en la muleta una nota digna, pero más baja que en el resto. Pero va a poner Cañaveralejo en pie. Al tiempo.

 

 

MANZARES TIENE EL SECRETO DE LOS GRANDES

Si hay fortuna y lo embiste un toro, José Mari es la gloria del toreo, el buen gusto, el sentimiento y más. Torero con todas las condiciones para marcar una época. Y ha elegido Cali para su breve campaña americana. Si tiene suerte, vamos a disfrutar, y mucho.

Padilla en La Chinita Foto: Germán D' Jesús Cerrada

PADILLA: EL MILAGRO DE LA FUERZA INTERIOR

 

Padilla es el exponente de la fuerza del ser humano cuando no se rinde. Padilla es un ejemplo, un héroe, que en lugar de hundirse se convierte en líder. Es la persona que más admiro. El ‘Pirata’ lo va a dar todo para enamorar Cali. Y en España, ha sido el líder en número de festejos. Increíble y admirable.

 

 

PERERA: EN EL MEJOR MOMENTO DE SU CARRERA

Lo de Perera es la rotundidad, la seguridad, la entrega, la quietud, el valor para engancharlos adelante y con la muleta barriendo la arena, llevarlos atrás. Está redondo, a poco que le ayuden los toros, este sale a hombros. Es un valor seguro.
Total: no hay forma de encontrar un error en la contratación de los ocho españoles. Pero lo bueno es que esto no son matemáticas y luego sale el toro y lo que era blanco lo tiñe de negro y al revés. Pero este año, de los ocho, ninguno es un relleno y eso honra a la empresa.

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