Jesús Ramírez "El Tato"
39 años se cumplen este 30 de noviembre de la alternativa de Manuel Medina "El Rubi".
El espada de Cagua se ha forjado como un torero importante dentro de la dureza de la profesión, porque ni en los ruedos ni en las oficinas de las empresas, le han puesto las cosas fáciles, aunque siempre se le ha considerado un torero de pundonor y destacados méritos, que supo y pudo dar la cara y triunfar, en aquella recordada Venezuela taurina con temporadas de 50 corridas de toros, con cuatro y cinco matadores venezolanos de máximo interés y todas las figuras hispanas haciendo campaña por nuestras ferias.
La vida torera de "El Rubi" comenzó desde niño como becerrista que desde un principio demostró su garra y vocación, formandose como novillero en España de la mano de Luis Álvarez.
Ese 30 de noviembre de 1986 en la maestranza, con Pedro González "El Venezolano" y el francés "Nimeño II", comenzaba una etapa de moral férrea sin rendirse ante los reveses soportados, porque hay toreros cuya capacidad y amor propio no tienen límites.
Todas las plazas y ferias de nuestro país son testigos del brillante perfomance del espada de Cagua que el pasado año se retiró en una triunfal tarde ante la afición de San Felipe, pero abrigando la esperanza de una retirada definitiva en una feria de mayor relieve.
Formado como torero vocacional. "El Rubi" no se rindió ante las empresas que le negaba el pan, y construyó entonces su propia plaza de toros que ha llevado por toda nuestra geografía, sembrando la fiesta brava, sumando fechas y triunfando.
Hoy con 39 años de matador de toros y toda una vida dedicada al toro, Manuel Medina sigue siendo "El Rubi", con renovada actitud torera, y la puerta entre abierta para seguir en la lucha con el pundonor de siempre.
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