domingo, 11 de octubre de 2015

Seis silencios entre el baile de hierros y presencia

LUIS SÁNCHEZ OLMEDO

Mario Alcalde, Amor Rodríguez y Alejandro Fermín eran los tres novilleros encargados de hacer el paseíllo este domingo en la penúltima de la temporada venteña. Se trataba de una novillada picada que llevaba el hierro de José Luis Pereda con remiendo de Julio de la Puerta preparada para tres jóvenes que habían podido dar golpes en Madrid a lo largo del 2015.
 
Muy poca historia tuvo el primero de La Dehesilla, manso de principio a fin que no permitió a Mario Alcalde más que dejar muletazos sueltos. Mató de pinchazo y entera para escuchar silencio. El cuarto fue un novillo de Julio de la Puerta con casta pero genio, que tenía el defecto de venir rebrincado y calamocheando constantemente. Iba dando tornillazos en todo momento. Muy rotundo con la mano derecha anduvo, con remates bellos por bajo. Mató de pinchazo, estocada entera y Mario Alcalde fue silenciado.
 
 
Una faena irregular dejó Amor Rodríguez al segundo, un novillo que siempre cumplió en la muleta pero con un punto de sosería. Acudió al cite el animal en todo momento. Dejó dos tandas notables en el inicio muleteril pero pronto se vino a menos la función. Mató de pinchazo, estocada entera y escuchó silencio tras aviso.  El quinto bis, sobrero de Julio de la Puerta en sustitución del lesionado titular, fue le novillo más cuajado de la tarde en cuanto a presencia se refiere. Poco se pudo decir de él: pasaba y pasaba sin decir nada, sin transmisión alguna. Lo intentó por ambas manos Rodríguez, sin que subiera de volumen la faena. Lo mató de buena estocada de la que tardó en caer, terminando tumbándose cuando sonaba un aviso.
 
 
El tercero, de Pereda, tenía nobleza y cumplía en la nobleza pero con muy poca transmisión. La faena de Alejandro Fermín estuvo basada en la mano izquierda. La faena en ningún momento cogió ritmo, matando de espadazo tendido muy feo que provocó la caída del animal.  El sexto resultó protestado, siendo el más peligroso de todo el encierro, sin estar en la muleta. Alejandro Fermín quiso en todo momento e intentando someter unas embestidas muy dificultosas. Terminó echándole mano en una fea voltereta sin consecuencias aparentes y mató de estocada entera un punto tendida. Escuchó palmas.
 
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas. Novillada con picadores de temporada. Un cuarto de entrada.
Dos novillos de José Luis Pereda, dos de La Dehesilla y dos de Julio de la Puerta.
Mario Alcalde, silencio en ambos. 
Amor Rodríguez, silencio  y división de opiniones.
Alejandro Fermín, silencio y silencio. 

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