Con los triunfos que obtuvo en las plazas europeas, concretamente la dos orejas que cortó en La plaza de Las Ventas de Madrid, y las seis apéndices y tres salidas a hombros de la plaza Monumental de Toros México, no se puede pensar que alguien refute que el matador Aguascalentense Joselito Adame, haya alcanzado el título de figura del toreo. Eso sin contar la oreja que cortó en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, las que se agenció en plazas francesas, en cosos españoles y en la misma geografía mexicana.
Joselito Adame es hoy por hoy el máximo exponente del toreo mexicano y no es una casualidad el que en el año 2013 se haya situado en lo alto de la cucaña. Su historial se remonta cuando a los 10 años de edad se incorporó la grupo Fiesta Futura que dirigía el romántico de la fiesta Pepe San Martín, quien lo presentó de niño torero en la plaza Monumental de Toros México y alcanzar sus dos primeras puertas grandes a hombros.
El título de Fiesta Futura no andaba mal dirigida porque ya alcanzo ese punto en la persona de Joselito Adame.
Han pasado ya 14 años desde esa fecha y no es como se dice, parece que fue ayer, pues en el lapso de tiempo no todo ha sido coser y cantar. Pues se han registrados triunfos, fracasos, tropiezos, amarguras, satisfacciones, percances muy serios y el torero se ha privado de sucesos terrenales como el haber marginado su infancia para tomar en serio esa dificil profesión, en la que desde niño se apasionó.
Ha sido un esfuerzo gigantesco que se ha realizados desde hace tres lustros teniendo como base determinación, disciplina, profesionalismo y amor a la fiesta y sobre todo una vocación.
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