El doctor Francisco Preciado, director del hospital de Guadalajara
J. Cristóbal García
En los últimos días el estado de salud del torero tlaxcalteca ha ido deteriorándose. “Ha tenido complicaciones relacionadas con el tipo de lesión que presenta -advierte el doctor Preciado-.
Ha tenido una neumonía que ya está resuelta. Respondió bien a los
antibióticos y ya está curado de la neumonía lo que nos ha permitido
retirar el tubo de drenaje pleural que tenía en el pulmón izquierdo.
Ahora lo que nos preocupa es la poca estabilidad que tiene en el ritmo
cardiaco. Desde la semana pasada registró un paro cardiaco, estuvo dos
minutos sin latido, y su capacidad cardiaca está muy frágil. El sábado
su latido registró frecuencias tan bajas como 20 por minuto. El domingo
también fue muy baja, pero respondió a medicamentos de tal forma que hoy
ha estado un poco más estable con los dos medicamentos que se le
suministran para lograr la presión y la frecuencia cardiaca que
deseamos”.
A pesar de ello, las esperanzas de que el diestro de Apizaco pueda salir con vida de este trance son escasas. “Existen
esperanzas de que pueda sobrevivir pero la experiencia, la literatura
médica, lo publicado en experiencia de muchos compañeros que han tenido
pacientes en circunstancias parecidas en todo el mundo dice que la
esperanza de vida es menor del 15% en las mejores condiciones de
atención médica. Aquí cuenta con todos los recursos humanos y de
equipamiento que le permiten estar bien atendido, sin embargo la lesión
lo tiene en un grave riesgo de que pueda fallecer en un corto plazo”.
En todo caso, El Pana dependerá de ventilación asistida y
de atención médica el resto de su vida, así nos lo explica el Francisco
Preciado: “El sábado hicimos un estudio de control, que se llama
potenciales evocados, que demuestra que hay una lesión irreversible en
la médula espinal que le tiene paralizado del cuello hacia abajo. No
tiene automatismo respiratorio, depende de un equipo de ventilación
asistida, que es lo que supone un riesgo tan grande para su vida. La
función está perdida y no hay la más mínima posibilidad de mejora. Sólo
esperamos que no se complique con nada más para enviarlo a su casa si
logra sobrevivir”.
El Brujo de Apizaco se encuentra consciente, con la
función cognitiva íntegra y un equipo de psicólogos está explicándole
paulatinamente su nueva situación. “Mueve los ojos, te sigue con
la vista, se trata de comunicar. Evidentemente no vocaliza porque la
colocación de la traqueotomía se lo impide, pero él mueve su boca y te
permite entenderle. Si te acercas y le haces una pregunta, él te
contesta perfectamente bien. Él tiene ganas de irse a su casa, pide irse
a su casa y le hemos explicado repetidas veces que eso ahora no es
posible pero estamos buscando la manera de lograr mandarlo a su
domicilio. Es obvio que cuando se pueda ir será porque tenga instalado
todo un equipo a su alrededor. Él necesitará de por vida estar conectado
a un ventilador volumétrico. Para ello hay que adecuar su casa: colocar
planta de energía eléctrica de emergencia, una cama de hospital, tiene
que tener un equipo de enfermería y de médicos cercanos a su cama para
que puedan atenderlo 24 horas al día 365 días al año. Es una situación
muy complicada”.
Es precisamente la dependencia de un soporte ventilatorio lo que pone su vida en riesgo. “En
estos casos la tasa de infección es muy elevada porque estamos
invadiendo una vía que necesita de toda la fisiología nasal y bucal para
retener todas las bacterias y en este caso lo que hay es un tubo
instalado directamente al cuello y por muchos filtros artificiales que
pongamos, las bacterias llegan más fácilmente a los pulmones. A ello hay
que sumar que la inmovilidad hace que los líquidos del pulmón se
estanquen y le hace más susceptible a infecciones más severas”, asegura el director del Hospital Civil de Guadalajara.
El Pana se encuentra acompañado de su familia, que ha
solicitado que le trasladen a planta para poder estar más cerca de él en
estos momentos. “Sigue en la UCI porque no hemos encontrado las
condiciones adecuadas para que pueda ser subido a piso. La familia nos
ha solicitado poder estar más cerca, y estamos viendo la manera de
hacerlo”.
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