martes, 31 de mayo de 2022

Talento de dos venezolanas dice presente en el programa The Voice Chile

Información Cortesía: World Stereo / Redacción: Lcdo. Jhoan Gutiérrez Terán

35 AÑOS DE LA QUEMA DEL MERCADO DE MÉRIDA (1886-1987)

Fotografías de Germán D'Jesús Cerrada del año 1976.

Germán D' Jesús Cerrada

Tomas Campuzano y "El Chorlo" apuestan por el éxito

Dos fechas en Perú 


 "El Chorlo" destacó en festival reciente en Taliga.

Jesus Ramirez "El Tato"

domingo, 15 de mayo de 2022

Juan José Scarpeccio, corazón rojo y blanco

Kiko Perozo
A Juan José Scarpeccio sólo le faltó cambiar el “vos” por el “usted” para ser un merideño completo. Sin embargo, esto no fue obstáculo para que este argentino se quedara en el corazón de los emeritenses y, en especial, de los seguidores del Estudiantes.

Doce temporadas vistiendo el uniforme blanco y rojo, armar una familia, dejar amigos por montón y reposar para la eternidad en medio de los Andes que le adoptaron, le revistieron de un manto de grandeza y humildad.

Fueron 54 los años que vivió, con el balón como arma y su sonrisa como escudo. “A todo le veía el lado positivo”, recordó de él su amigo e historiador del club albirrojo, Pedro Quintero.

La Federación Venezolana de Fútbol dedicó el campeonato 2006-2007 en honor al mediapunta argentino.
 
Un jugador “del montón”

Nacido el 14 de mayo de 1952 en Las Parejas, provincia argentina de Santa Fe, como Juan José Scarpeccio Sabattini, este volante alguna vez se definió como un futbolista del montón.

“Como jugador creo que soy un mediocre, pero pienso con anticipación las jugadas que voy a realizar. Para jugar al fútbol hay que pensar. Por esta razón, algunos jugadores se destacan más que otros”, sostuvo en una entrevista.

Argentinos de Las Parejas (donde coincidió con otro santafesino, Jorge Valdano, a la postre campeón del mundo en 1986 y un exitoso delantero) y el Club Atlético Platense de su país; Estudiantes de Mérida en Venezuela y el Temberaty, de Paraguay, le vieron sudar sus camisetas.

Y, lejos de la mediocridad que proclamó en medio de su modestia, todos le definen como uno de los mejores, sino el mejor, jugador extranjero que ha pasado por tierras venezolanas.

Juan José Scarpeccio
Luis Mendoza, la máxima referencia en la historia del fútbol nacional, estaba en el gran Portuguesa de los años 70, el primer rival del Estudiantes de Scarpeccio. Así define “Mendocita” al mediocampista.
“Cubría muy bien la pelota y la dominaba, la pisaba, como buen argentino de calidad. Veía la jugada antes de que le llegara a los pies; si tenía que poner la pausa, la hacía en el momento justo; tenía una arrancada con dribbling hacia todos los perfiles; te hacía un túnel en lo que te descuidabas”.

Walter “Cata” Roque lo tuvo en sus filas en el once merideño, entre las temporadas 77-78, y en la selección nacional de Venezuela en las eliminatorias al Mundial de España 1982, aunque en ésta se lesionó y tuvo que salir prontamente.

“Scarpeccio fue un jugador completo —considera “Cata”—. Fue un mediocampista que tenía cuota de gol y progresión defensiva, aunque su área era de media cancha para arriba”.
 
Scarpeccio, ídolo en Mérida

Cerebral, parsimonioso, pero con su pizca de potencia y chispa. Ése era Juan José.

Quintero, seguidor e historiador de Estudiantes, le conoció desde que llegó al club albirrojo en marzo de 1973.

“Él vivió con nosotros. Mi mamá tenía una pensión y se quedó a vivir con nosotros, bastante tiempo, hasta que él se trajo a su novia (Luly), con la que posteriormente se casó, de Argentina, y bueno, hizo su familia”, rememoró Quintero, que tiene una página web en honor al mediapunta santafesino.

Scarpeccio, jugó doce temporadas en Estudiantes, y se convirtió en el tercer mayor anotador, después del uruguayo José Enrique Chiazzaro (129 goles) e Ildemaro Fernández (87). El santafesino marcó 84.

Allí se convirtió en ídolo de los merideños, por su don de gente y su forma de jugar. Y él amó a Mérida como pocos: se casó y tuvo sus tres hijos allí, Mayra, Gianni Paolo y Cristian (que en 2007 militó en el Carabobo FC).

Quintero cuenta que una vez le dijo que él había tenido mala suerte, porque su compatriota y excompañero en Las Parejas, Valdano, había llegado donde había llegado, y él no tuvo esa oportunidad.

“Y me respondió (Scarpeccio): ‘Cómo que mala suerte, si yo vivo en Mérida, y todo el mundo no tiene la suerte de vivir en Mérida”, relata Quintero.

En la temporada 79-80, Scarpeccio, capitán estudiantil, fue suspendido por cuatro meses por una trifulca en un Estudiantes-Portuguesa. Se fue a Paraguay, para jugar en el Tembetary, pero regresó para ganar el campeonato y el subcampeonato de los merideños 1981, y retirarse en 1985.

Luego fue directivo, miembro de la comisión técnica y entrenador de Estudiantes en el año 2000.

En familia, el argentino era recto y ejemplar, como lo cuenta su hijo Gianni: “Era una persona que vivía para los demás, que trataba a todos por igual. Pura voluntad. Como padre, sin ser severo, le gustaba que las cosas salieran bien”.

Hombre culto, Scarpeccio leía a Jorge Luis Borges, su poeta favorito era Andrés Eloy Blanco y los personajes que le movían fueron José de San Martín y Simón Bolívar. Lo lógico para alguien que vivió con el corazón entre los dos países que liberaron los héroes suramericanos.

Hoy, su hijo Gianni administra Valle Hermoso, un parque infantil inaugurado por Juan José y su hermano Hugo a mediados de los años 80.

El 28 de julio de 2006 la estrella se apagó. Un accidente de tránsito en la curva de La Guabina, entre la carretera San Carlos-Acarigua, segó la vida del exjugador, seguidor, empresario, padre, hermano y amigo.

La Mérida que le adoptó, a la que tanto amó, lo llevó en hombros hasta su destino final.

viernes, 13 de mayo de 2022

Expectativa por carteles de la Feria de Tovar


Si ninguno de los toreros anunciados hace dupla, faltaría uno por contratar.


Johan Santana adelante con una feria en un marco distinto abrazado al éxito.

Jesús Ramírez "El Tato"

miércoles, 11 de mayo de 2022

sábado, 7 de mayo de 2022

Llanto de seda y oro por el hijo torero

Doña Esperanza Díaz de Girón ejemplo de madre abnegada que vio compensado sus desvelos.

Jesús Ramírez"El Tato"

Jorge Valdano leyenda del fútbol mundial

En una encrucijada de Barcelona me encontré con una leyenda del fútbol mundial, el argentino Jorge Valdano, residenciado en España desde hace varios años.

Ese día del encuentro, el mundialista Valdano estaba de tránsito en Barcelona, estaría comentando de fútbol en un programa de televisión.

Jorge Valdano Castellanos (Las Parejas, Santa Fe; 4 de octubre de 1955) es un exfutbolista y exentrenador argentino Campeón del mundo con Argentina en el Mundial de México 1986, jugaba de delantero y su primer equipo fue Newell's Old Boys. Como entrenador desarrolló toda su carrera en España, dirigiendo al Club Deportivo Tenerife, Valencia Club de Fútbol , Real Madrid, Las Palmas, Deportivo Alavés y Real Zaragoza. Actualmente trabaja como comentarista para Movistar Liga de Campeones y Movistar La Liga, también interviene en el programa El Transistor, de «Onda Cero».
Fuente Wikipedia

Barcelona, España en Bicicleta

Todos los días recorro kilómetros en bicicleta por la ciudad de Barcelona, la ciudad más cosmopolita de España.

El próximo mes de julio cumplo cuatro años de haber llegado a esta ciudad. Con esta columna quiero dejar plasmado lo que veo a diario en una ciudad donde conseguimos cosas maravillosas y personas de todo el mundo. Empiezo mi odisea gráfica con esta foto de la bicicleta olvidada en una esquina de Barcelona, alguien la dejó asegurada con una cadena en el tronco de un árbol, con el tiempo se fueron llevando las partes, hasta dejarla casi en un esqueleto, sin embargo la bicicleta no quiere morir y sigue esperando a su dueño.

José Antonio Valencia se prepara en el campo bravo español


Sigue la saga de los Valencia


Quietud y temple de José Antonio Valencia.

Debuta con caballos en España el 21 de mayo.

Jesús Ramírez"El Tato"