á. g. abad / R, Pérez
Se cumple el segundo aniversario de la última corrida en la Monumental catalana
Segunda Mercè sin toros en la Monumental, pero no sin tarde de toros en la que ilusionarse con el futuro. Justo hace dos años se celebró la última corridaen el coso catalán, un cierre con inolvidables estampas de toreros a hombros por las calles entre las campanas del entierro. La Gran Vía colapsada
por la procesión de aficionados que recorría el Ensanche. Crecía el
clamor por la Fiesta en la última feria, tanto en la tarde de Morante, El Juli y Manzanares, como en la de Juan Mora, José Tomás y Serafín Marín, que despachó al último toro, «Dudadelegre» de nombre.
El matador de Montcada i Reixac,
que vivió el último cortejo a hombros, confesaba un día después a ABC,
el 26 de septiembre de 2011, que estuvo a punto de no matar a ese astado
de El Pilar,«aunque me llevasen detenido». Aquella jornada de sones fúnebres, toros y toreros elevaron la música del toreo con un concierto al natural y un capote en el que se leía la palabra «Libertad», nombre apuntillado por el Parlament catalán.
José Tomás, el ídolo y resucitador de la Monumental,
prefirió no irse en volandas por las calles y recorrió en furgoneta los
tres kilómetros que le separaban del hotel OMM, su cuartel general. Del
madrileño habla y no para aún la afición catalana, de su pureza y su autenticidad.
El libro del héroe
La víspera de la patrona de Barcelona, un grupo de aficionados se reunieron en la librería Laie, en pleno centro de la ciudad condal, para rendir homenaje al último ídolo de la afición catalana,
al torero que mantuvo, y mantiene, viva la llama de una esperanza, el
que llenó hasta la bandera la plaza una y otra vez convirtiéndose en el
bastión para salvar la Fiesta.
Se presentaba la nueva obra de Editorial Bellaterra «José Tomás, de Nimes al cielo» y el acto fue una tarde de toros más en esta Barcelona de libertades cercenadas. El libro recoge la historia y el análisis del festejo que el torero madrileño protagonizó en la arena del circo de Nimes el 16 de septiembredel
año pasado. Un día para la historia, un día para el recuerdo, sobre el
que numerosos autores escriben sus vivencias, lo que les provocó aquella explosión de toreo,
aquella reivindicación de la Fiesta en toda su dimensión, en todo su
carácter sociocultural que traspasa frontera lejos de levantarlas. (Pinche aquí para ver las fotos de José Tomás en Francia)
Una cuidada selección de fotografías ilustra textos del empresario Simón Casas o de Victor Gómez Pin, de Araceli Guilloume Alonso o de Francis Wolff y François Zumbiehl. De activistas de la resistencia taurina catalana como Alberto Taurel, Paco Píriz y Aitana y Paco March.
La ficha de la corrida, el análisis de las faenas que
enloquecieron al público, una biografía del diestro y un repaso de lo
que dijo la Prensa, completan un volumen de coleccionista, un ejemplar
que trata de explicar el porqué un hombre y un toro en
un bimilenario circo romano consiguieron algo que interesó en todo el
planeta y fue noticia en periódicos de todo el mundo. Un libro que
sirvió para que muchos se ilusionaran con ver al torero de nuevo en el patio de cuadrillas de
La Monumental un día de la Mercè. Si alguien puede conseguir el milagro
es él, que volvió a Barcelona con un espíritu vivo de esperanza.
Políticos aparte, claro está.
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