López Simón confirma la realidad que Madrid atisbó: su escalafón es el de las figuras. Cortó tres orejas a una deslucida corrida de Jandilla. Sin suerte Moral y desdibujado Padilla
La peligrosa corrida de Jandilla que esta mañana había protagonizado el primer encierro de San Fermín salía a escena en la primera corrida de toros a pie del serial pamplonés. En el cartel, el jerezano Juan José Padilla, asiduo del serial navarro, el sevillano Pepe Moral que por méritos propios se ha ganado estar en las Ferias y el madrileño Alberto López Simón con la vitola de haber abiertos dos Puertas Grandes en Madrid el pasado San Isidro.
Hacía gestos muy raros el primero de Jandilla al salir al ruedo, no logrando encelarlo la cuadrilla de Juan José Padilla. Un buen puyazo le recetó Antonio Calvo "Montoliú"antes de que el jerezano dejara un quite por chicuelinas rematado con una revolera. Dejó el picador de dinastía una segunda vara leve. Dejó dos pares de buena ejecución y un tercero al violín que hicieron gustarse al público. Brindó al respetable para dejar muletazos por alto a pies juntos en tablas y un molinete para rematar el inicio muleteril. Arrollaba el toro y no se sentía a gusto el torero cuando, a raíz de la falta de fuerza, comenzó a arrollar y a embestir a media altura. Padilla no le encontró sitio al toro. Dejó un estoconazo que acabó pronto con su vida.
Menos estampa tenía el segundo de Jandilla, al que se le dio poquísimo en varas por la evidente falta de fortaleza que acusaba. No se comportó bien en la voluntad de Moral para pasaportarlo por verónicas ni tampoco en el quite posterior de Alberto López Simón por chicuelinas. Brindó tras el tercio de banderillas al respetable y le inició faena por cambiados en el centro del anillo, ligando dos series de derechazos ante un toro que embestía con fiereza pero sin ritmo, que protestaba mucho por arriba y al que Moral no le pudo por abajo. Se enfadaba el de Borja Domecq cuando tocaba los avíos del torero de Los Palacios, costándole al astado entrar en la faena de Pepe. Dejó naturales sueltos por bajo en el final de la faena, templado, acoplándose a la condición de un astado con una doble cara. Pinchó y dejó estocada.
Quiso encelarlo a la verónica López Simón al tercero, un toro que parecía humillar de salida sus 515 kilos y que lo cuidó desde el primer momento la cuadrilla del torero madrileño. El caballo de Ángel Rivas dejó dos varas muy leves, para que posteriormente le hiciera le hiciera las cosas perfectas con el capote Ángel Rivas y César del Puerto con los palitroques. Comenzó su faena por torerísimos estatuarios en el tercio, subiendo la temperatura de la faena en la siguiente tanda de templadísimos derechazos rematados por un pase de pecho muy largo. Más en corto en las dos siguientes tandas, el de Barajas comenzó a darle el pecho y enfrontilarse ante un toro al que esperaba de forma genial, ligando de forma perfecta al astado. Bellísimos fueron los naturales finales por bajo y en la misma raya del tercio, templando aún más su embestida. De rodillas remató López Simón una faena a más, en la que dejó un circular tremendo de hinojos en el que el toro hizo por él sin consecuencias aparentes. Una estocada al encuentro un punto baja selló la actitud del torero. Oreja.
Bajo de casta era un tercero que se las vio con un Padilla desdibujado en todo momento. No banderilleó tras los palos de Alventus, haciéndolo Daniel Duarte y Miguelete. En faena, no atacó Padilla a un toro que se vino a menos por momentos, con poca fuerza y sosísimo en su conjunto. Además, anduvo desdibujado el torero de Jerez en un trasteo que no transmitió a los tendidos. Sin compromiso la labor de Padilla en una lidia que se alargó.
Le rajó el capote a Pepe Moral el quinto, un toro con una cara agresiva y pitones astifinos que empujó al jaco de inicio. Lo cuidó en banderillas la cuadrilla del torero de Los Palacios, que brindó posteriormente a Saúl Jiménez Fortes tras la cornada gravísima de Madrid. Tenía franqueza el grandón de Jandilla en el inicio muleteril de Moral, cuando parecía que iba humillado y entregado. Mejor respondía el astado de Borja Domecq por el lado derecho, pues al natural daba gañafones y no se entregaba a la muleta. Más en corto por la diestra, intentó Moral dejar derechazos sueltos en corto ante los apabullantes y amenazantes pitones del toro, ganándole a éste la partida en este epílogo muleteril. Se rajó el toro.
Le dejaba muy bien el capote López Simón al sexto, uno de Jandilla al que Tito Sandoval le recetó dos puyazos de perfecta ejecución, apretando a Vicente Osuna a las tablas en palitroques. Se inventó López Simón, tras el brindis al respetable, al toro en un inicio de faena en el que lo sometió muchísimo bajándole la mano derecha. Gusto tuvieron sus muletazos por ese pitón con un gusto extremo antes de dejar naturales bajos a un toro que embestía a media altura. Más en corto lo intentó poco después, asentado entre los pitones del de Jandilla. Las manoletinas finales fueron de escándalo, para dejar una estocada que lo tumbó sin puntilla. Dos orejas.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros Monumental de Pamplona. 7 de julio de 2015. Tercera de la Feria del Toro. Corrida de toros.
Seis toros de Jandilla, impecables de presencia.
Juan José Padilla, silencio y silencio.
Pepe Moral, silencio y silencio.
Alberto López Simón, oreja y dos orejas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario