Salieron en hombros ante una corrida de Cuvillo salvada por el buen sexto; Morante paseó una del cuarto y fue abroncado fuertemente en el primero
FRAN DOMÍNGUEZ
Morante de la Puebla, Miguel Ángel Perera- en sustitución del lesionado José María Manzanares- y José Garrido hacían esta tarde el paseíllo en la plaza de toros de Campos Góticos de Palencia. El hierro correspondía al gaditano de Núñez del Cuvillo.
Con el primero, de 559 kilos y con el hierro de Cuvillo, Morante abrevió faena. Era brusco en sus acometidas, con tornillazos por ambos lados que, sumados al aire, hicieron que no arriesgara el de La Puebla. De estocada y descabello mató a su oponente para ser fuertemente abroncado. Morante dejó temple y sensibilidad ante un cuarto justo de fuerzas. Toreó con la cintura el de La Puebla por el pitón derecho al de Cuvillo, gustándose en momentos de intensidad por ese pitón. Mató de espadazo y paseó la oreja.
El segundo, con 493 kilos, fue un buen toro con calidad aunque justo de fuelle al final de faena. Perera selló un trasteo variado, recibiéndolo antes con dos rodillas en tierra a la verónica para echarse el capote a la espalda por gaoneras y rematar con vistosa revolera. Quitó por chicuelinas para iniciar poco después su faena por estatuarios. Tuvo momentos de interés en redondo, pero se vino a menos el de Cuvillo antes de un soberbio arrimón, un pinchazo y una estocada que valieron la oreja. Otro manso y deslucido fue el quinto, aprovechando Perera el ir y venir del animal para correrle la mano en dos tandas a diestras y zurdas. Fue un trasteo de jugar con el animal poco después en cercanías que, tras una estocada recibiendo, hizo que se le concediera la oreja que le abría la puerta grande.
El tercero, que pesaba 498 kilos, fue un toro con mucha calidad pero inválido de libro, que incompresiblemente se quedó en el ruedo por el empecinamiento presidencial. No tuvo emoción la faena de Garrido, tan sólo mucho tacto para mantenerlo en pie porque no tuvo transmisión alguna el toro. Finalmente el extremeño dejó algún natural bueno para escuchar una ovación con saludos tras petición. Salvó el encierro el buen y encastado sexto, al que Garrido el formó un lío de principio a fin. Lo recibió con verónicas a la perfección y una gran media. Toreó por ambas manos a ese toro en una gran faena sobre todo a zurdas. Se fue el toro aplaudido en el arrastre, salvando una corrida que hasta ese momento no había roto. Tras estocada paseó doble trofeo el extremeño.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Campos Góticos, Palencia. Cuarta de Feria. Corrida de toros.
Seis toros de Núñez del Cuvillo, deslucidos salvo el buen sexto.
José Antonio "Morante de la Puebla”, pitos y oreja.
Miguel Ángel Perera, oreja y oreja.
José Garrido, ovación y dos orejas.
Se desmonteró Fini tras parear al sexto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario