Un amigo, buen amigo, navarro lleva un par de noches alucionado con el jaleo del alcalde de Pamplona, Joseba Asiron. Y no menos con las reacciones protaurinas en las redes. Ninguna se ha parado a analizar despacio y con luz la "especificidad" de la Casa de Misericordia de Pamplona -propietaria única de la plaza- y su Feria del Toro. Y piensa que todo esto está "generando una incertidumbre innecesaria en torno a una feria que, hoy por hoy, es uno de los baluartes de la tauromaquia en España". Por su interés, reproducimos el argumentario que ha elaborado con profundo conocimiento de las características internas que sostienen la impagable salud de la Pamplona taurina y su opinión sobre la sobredimensionada y dañina polémica:
"La casa de Misericordia (MECA) es una entidad privada que organiza y gestiona directamente, sin delegación, la Feria del Toro.
El Ayuntamiento, como otras instituciones y colectivos vecinales, tiene participación minoritaria en esta institución.
La MECA es una institución benéfica querida e integrada perfectamente en el tejido social de la ciudad.
La institución ha convivido desde siempre, sin problema alguno, con todo tipo de corporaciones municipales, de muy diferente signo.
La MECA es la propietaria única de la Plaza de Toros de Pamplona.
La Plaza de Toros de Pamplona es una instalación privada, que está completamente amortizada, perfectamente acondicionada y cuenta con todas las licencias necesarias para organizar festejos taurinos y de cualquier otra índole (conciertos, ferias, espectáculos...).
Todos los ingresos de la MECA provenientes de la Feria Taurina se limitan a la venta de entradas de las corridas, venta de entradas en la plaza de toros durante los encierros o espectáculos matinales y los derechos de TV de las corridas vespertinas.
La MECA asume los costes directos del encierro: Toros, vallado, pastores, corrales, personal Plaza de Toros....
La MECA no ingresa nada por las retransmisiones de los encierros. El operador u operadores que emiten estos festejos, no pagan derechos por la retransmisión y venta de las imágenes de los encierros a todo el mundo.
Las Feria Taurina de Pamplona, organizada por la Casa de Misericordia tiene todas las garantías de continuidad:
1. Asistencia masiva a los festejos. Rentabilidad, por tanto, garantizada.
2. Titularidad de las instalaciones.
3. No está sometida a vaivenes y decisiones políticas coyunturales.
4. No está sometida a concursos y pliegos de adjudicación periódicos.
5. Es una institución benéfica, respetada y querida. Los gestores no tienen interés privado alguno en la organización de la Feria.
Todas estos condicionantes otorgan a la Feria del Toro un blindaje que para sí quisieran la mayoría de las Ferias de este país. En este momento, la Feria del Toro es la feria con más garantías de futuro y la Casa de Misericordia de Pamplona un caso único entre las grandes ferias taurinas. El mismo propietario de la instalación, gestiona directamente la feria con fines estrictamente benéficos.
Especular sobre el futuro de las corridas de toros en Pamplona a raíz de unos supuestos comentarios del alcalde no tiene, por tanto, mucho sentido: parte de un análisis completamente equivocado de la coyuntura y especificidad de la Feria del Toro y está fuera de lugar, generando una incertidumbre innecesaria en torno a una feria que, hoy por hoy, es uno de los baluartes de la tauromaquia. En todo caso, lo que hipotéticamente estaría sometido a posibles decisiones ajenas a la Casa de Misericordia, es la celebración de los encierros por las calles de la ciudad, cosa que no se ha planteado y no se puede desprender de las declaraciones del alcalde, sino todo lo contrario".
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