VALENCIA. FERIA DE FALLAS
Jorge Casals
El que cerró plaza fue un auténtico galán. Un toro
con cuajo, de 595 kg., hondo, estrecho de sienes pero enseñando las
puntas. Lo paró muy bien a la verónica Miguel Ángel Perera, que esta
tarde manejó con temple la capa. Emocionante el comienzo de faena con la
muleta, en el centro del ruedo, pasándose al toro por la espalda en
encadenados pendulares. Perera toreó muy bien en redondo, con una muleta
templada y poderosa que condujo hasta detrás la embestida, por abajo,
con pulcritud. Muy asentado en todo momento el torero, se le vio a
gusto, con la mente despejada. Decayó la faena en el toreo al natural,
por donde el toro tuvo menos profundidad. Con el toro venido a menos
acortó distancias para hacer gala de su toreo estático.
El quinto fue otro toro que se vino arriba en la muleta y que embistió mucho y bien, por ambos lados. El Cid ligó tandas de derechazos que tuvieron poco eco en los tendidos. Se acopló mejor sobre la zurda. Dos tandas de naturales tuvieron largura y mando. Faena sin acabar de concretar ante un toro con posibilidades. Pinchó en dos ocasiones antes de dejar una estocada. Palmas al toro en el arrastre.
Ante el cuarto, Padilla fue más ciclón que nunca. De principio a fin el jerezano puso toda la carne en el asador en una lidia completa, en la que sin tiempos muertos, logró entusiasmar a un público muy volcado con el torero. Toro importante el de Vegahermosa, encastado, bravo, repetidor y con mucha calidad, humillando con clase y temple. Mejor por el pitón derecho que por el izquierdo, donde se quedaba más corto.
Recibió al toro con seis largas cambiadas y varias chicuelinas, poniendo al público en pie de primeras. Variado con el capote. En el galleo para llevar al toro al caballo casi se lo lleva por delante. Buen tercio de banderillas, clavando con pureza en la cara y ganándole bien la cara al toro. Templada resultó la faena de muleta, que basó sobre la mano diestra. Bien el torero, a la altura de un buen toro. Los desplantes finales enloquecieron a una parroquia que aclamaba a su ídolo a gritos de ¡torero, torero! Padilla en estado puro. Pinchó antes de dejar una gran estocada que tumbó al toro. Se le pidió con mucha fuerza la segunda oreja.
El tercero hizo una pelea de manso en varas. Muy aquerenciado, tuvo que ir el piquero a buscar al toro. No fue fácil el torero, pero la firmeza, solvencia y poderío de un Perera en plenitud, taparon muchos defectos del de Vegahermosa, al que toreó en los terrenos donde no tenía querencia. Firme de planta el torero, con mucho temple, fue metiendo al toro en la muleta poco a poco y se inventó una faena en la que estuvo en todo momento muy por encima del toro. El toro le chafó con la pezuña y en ese trompicón fue prendido por la faja, viviéndose momentos angustiosos. Pero no pasó nada. Mató de una buena estocada. Hubo petición que el presidente desatendió.
El segundo flojeó en los primeros tercios, donde fue protestado por el público. Buen quite de Miguel Ángel Perera por templadas gaoneras. Pero se vino arriba el toro en la muleta, embistiendo pronto y alegre, con recorrido. Mucho que torear el toro, con el único pero que en ocasiones se metía por dentro, quizá por el aire que bamboleaba la muleta. El Cid planteó una faena sobre ambas manos, que no siempre alcanzó el acople deseado. Faena larga, de muchos muletazos, que no acabó de calar en el público. Mató de una estocada entera arriba.
Buena tarjeta de presentación la que dejó Juan José Padilla en el saludo capotero al primero de la tarde, meciendo el capote en verónicas acompasadas. En banderillas destacó en un par al quiebro, pegado a tablas. Brindó la faena a Tendido Joven de Valencia. Mucha disposición mostró el jerezano ante un toro noble pero venido a menos. Faena aseada en la que el torero tiró muy bien del toro, con mando. Mató de un volapié cayendo la estocada baja.
Lunes 18 de marzo. Feria de Fallas. Toros de Jandilla y Vegahermosa (3º y 4º). JUAN JOSÉ PADILLA: Ovación con saludos tras aviso y oreja con fuerte petición de la segunda; MANUEL JESÚS “EL CID”: Ovación con saludos tras aviso y silencio tras aviso; MIGUEL ÁNGEL PERERA: Ovación con saludos tras aviso y oreja tras aviso. Entrada: Casi tres cuartos.
El quinto fue otro toro que se vino arriba en la muleta y que embistió mucho y bien, por ambos lados. El Cid ligó tandas de derechazos que tuvieron poco eco en los tendidos. Se acopló mejor sobre la zurda. Dos tandas de naturales tuvieron largura y mando. Faena sin acabar de concretar ante un toro con posibilidades. Pinchó en dos ocasiones antes de dejar una estocada. Palmas al toro en el arrastre.
Ante el cuarto, Padilla fue más ciclón que nunca. De principio a fin el jerezano puso toda la carne en el asador en una lidia completa, en la que sin tiempos muertos, logró entusiasmar a un público muy volcado con el torero. Toro importante el de Vegahermosa, encastado, bravo, repetidor y con mucha calidad, humillando con clase y temple. Mejor por el pitón derecho que por el izquierdo, donde se quedaba más corto.
Recibió al toro con seis largas cambiadas y varias chicuelinas, poniendo al público en pie de primeras. Variado con el capote. En el galleo para llevar al toro al caballo casi se lo lleva por delante. Buen tercio de banderillas, clavando con pureza en la cara y ganándole bien la cara al toro. Templada resultó la faena de muleta, que basó sobre la mano diestra. Bien el torero, a la altura de un buen toro. Los desplantes finales enloquecieron a una parroquia que aclamaba a su ídolo a gritos de ¡torero, torero! Padilla en estado puro. Pinchó antes de dejar una gran estocada que tumbó al toro. Se le pidió con mucha fuerza la segunda oreja.
El tercero hizo una pelea de manso en varas. Muy aquerenciado, tuvo que ir el piquero a buscar al toro. No fue fácil el torero, pero la firmeza, solvencia y poderío de un Perera en plenitud, taparon muchos defectos del de Vegahermosa, al que toreó en los terrenos donde no tenía querencia. Firme de planta el torero, con mucho temple, fue metiendo al toro en la muleta poco a poco y se inventó una faena en la que estuvo en todo momento muy por encima del toro. El toro le chafó con la pezuña y en ese trompicón fue prendido por la faja, viviéndose momentos angustiosos. Pero no pasó nada. Mató de una buena estocada. Hubo petición que el presidente desatendió.
El segundo flojeó en los primeros tercios, donde fue protestado por el público. Buen quite de Miguel Ángel Perera por templadas gaoneras. Pero se vino arriba el toro en la muleta, embistiendo pronto y alegre, con recorrido. Mucho que torear el toro, con el único pero que en ocasiones se metía por dentro, quizá por el aire que bamboleaba la muleta. El Cid planteó una faena sobre ambas manos, que no siempre alcanzó el acople deseado. Faena larga, de muchos muletazos, que no acabó de calar en el público. Mató de una estocada entera arriba.
Buena tarjeta de presentación la que dejó Juan José Padilla en el saludo capotero al primero de la tarde, meciendo el capote en verónicas acompasadas. En banderillas destacó en un par al quiebro, pegado a tablas. Brindó la faena a Tendido Joven de Valencia. Mucha disposición mostró el jerezano ante un toro noble pero venido a menos. Faena aseada en la que el torero tiró muy bien del toro, con mando. Mató de un volapié cayendo la estocada baja.
Lunes 18 de marzo. Feria de Fallas. Toros de Jandilla y Vegahermosa (3º y 4º). JUAN JOSÉ PADILLA: Ovación con saludos tras aviso y oreja con fuerte petición de la segunda; MANUEL JESÚS “EL CID”: Ovación con saludos tras aviso y silencio tras aviso; MIGUEL ÁNGEL PERERA: Ovación con saludos tras aviso y oreja tras aviso. Entrada: Casi tres cuartos.
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