Trabajadores de la salud objeto de desplantes y rechazo
Primer médico muerto en Colombia, se encienden las alarmas (foto: ANSA)
(ANSA) - BOGOTA, 11 ABR -
Este sábado se anunció la primera muerte de un médico colombiano por coronavirus, quien se desempeñaba en una clínica privada de Bogotá, lo que despertó alarma entre los trabajadores de la salud del país.
El anuncio del primer facultativo muerto por Covid-19 la hizo el Ministerio de Salud, a través de Twitter junto a un comunicado de la Clínica Universitaria Colombia donde se desempeñaba el especialista, al tiempo que lamentó su deceso.
"Su memoria perdurará, con enorme gratitud, en todas las vidas que contribuyó a salvar a lo largo carrera. Nuestra solidaridad con sus familiares y allegados en estos momentos", dijo en su mensaje el ministerio.
Tanto la clínica como la cartera de Salud obviaron dar el nombre del galeno, tan solo informaron que laboraba en "urgencias" de la clínica y que su deceso fue hoy, sin ahondar en detalles.
"En medio del dolor, agradecemos a todas las personas que se entregaron por completo para ayudar en esta situación", manifestó la clínica en un comunicado, en el que dijo que en el marco de su "plan" para enfrentar la pandemia estaba el cuidado de sus trabajadores.
"Se ha ido uno de nuestros héroes. Que su recuerdo nos llene de fuerza para continuar y para seguir firmes en nuestro propósito de cuidado a todos los colombianos", concluyó el mensaje del centro médico.
En la primera semana que se supo del arribo del coronavirus al país se registraron manifestaciones sociales de aprecio y gratitud hacia el personal sanitario, como noches de aplausos y actos espontáneos de solidaridad de taxistas que los transportaban de manera gratuita a sus sitios de trabajo.
Pero el tema cambio en las semanas que siguieron y en la medida que el número de positivos aumentó y empezaron a aparecer las primeras víctimas mortales.
Fue ahí cuando los médicos, enfermeras, auxiliares, camilleros y otros trabajadores del sector se convirtieron en objeto de rechazo, desplantes, miradas acusativas y hasta maltrato de personas que los consideran "foco" de la infección.
El tema ha llegado a tal punto que en varias ocasiones el presidente, Iván Duque, ha reclamado solidaridad y apoyo a la labor de los empleados sanitarios.
Incluso la Defensoría del Pueblo calificó de "angustiante" la "situación" del "personal médico-asistencial" del país debido a la "falta de elementos de bioseguridad y protección laboral" en la que se encuentran, pidió no "abandonarlos" y reclamó de las instituciones de salud "solidaridad y cumplimiento de la ley".
La Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC) elaboró recientemente un encuesta con entidades de salud que buscaba identificar las debilidades del sector frente al coronavirus y entre sus hallazgo detectó que solo tenían garantizada la dotación de protección adecuada para atender la enfermedad para cuatro semanas en promedio.
El 91% de las instituciones consultadas evidenció que los barbijos aumentaron su precio, mientras que el 72% advirtió que su oferta había disminuido. El alcohol y la ropa de protección también fueron elementos escasos o cuyos costos subieron desde la llegada de la pandemia.
Entre los pedidos hechos por el personal de salud al gobierno el primero fue el llamado para aumentar los insumos de protección, seguido de la renovación expedita de contratos laborales, el pago oportuno de salarios, subsanar las deudas oficiales con los hospitales y hasta la exención de impuestos, entre otros reclamos.
Colombia tiene hasta hoy registradas 80 muertes por coronavirus, 2.473 contagiados, 197 personas recuperadas y se mantiene desde el pasado 25 de marzo en una cuarentena nacional que ira hasta el 27 de abril. (ANSA).
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